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“Terminamos la inspección clínica ginecológica y efectivamente la niña de 13 años tiene un desgarro de antigua data, la niña no da el nombre del autor”, refirió el fiscal Gustavo Yegros, encargado del caso, quien remarcó que con esto se comprueba el delito y ahora están tras el responsable.
Indicó que tomaron intervención del caso a través de una denuncia anónima, que refiere que la víctima habría confesado que fue ultrajada, mediante una carta a un pastor evangélico ya en diciembre; sin embargo, recién ahora saltó la denuncia formal.
“La denuncia en sí apunta hacia el padre de la niña. Viven todos juntos con la madre y 5 hermanos. Tiene un hermano mayor, ella es la segunda. A los 5 hermanos se le practicó la prueba y solamente la niña de 13 resultó ser un caso positivo”, expresó el fiscal. El hecho habría ocurrido en Fernando de la Mora, donde la menor reside.
Tanto el padre como la madre de la menor afirman que desconocían la violación que sufrió su hija. Para tratar de encontrar al responsable, el fiscal convocó a la niña para que sea evaluada psicológicamente y posteriormente también citará al pastor del Centro Familiar de Adoración (CFA) que ya habría tenido conocimiento del caso, así como a los padres.
Los padres “dijeron que no tenían conocimiento de esto, por eso es importante la declaración de la menor (para ver si da nombres), del pastor evangélico y los padres y para indagar si ya sabían del caso porque no denunciaron”, afirmó el fiscal de la causa.
“Ella (la niña) está citada este lunes a realizarse una evaluación con la psicológica de evaluación a víctimas, que primeramente realizará un diagnóstico y es muy probable que recomiende una cámara gesell y vamos a solicitar al juzgado”, remarcó.