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"No podemos desoír el reclamo de la ciudadanía", manifestó el diputado Núñez en conversación con este diario. Anunció que mañana, durante una conferencia de prensa, sentará la postura oficial de la bancada, integrada por veinte diputados y pedirán formalmente a Ibáñez que renuncie a su banca.
Los legisladores que integran la bancada oficialista se habían abstenido de votar por la pérdida de investidura del ratero confeso Ibáñez, durante la sesión del pasado miércoles.
El cuestionado legislador, en 2013, hizo contratar en la Cámara de Diputados a tres personas que se encargaban de cuidar su casa quinta ubicada en Areguá. Además, se quedaba con parte del dinero que cobraba en su nombre.
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La fiscalía confirmó que cometió los delitos de estafa, cobro indebido de honorarios y producción de documentos falsos. El legislador admitió los hechos que se le imputan. Sin embargo, la semana pasada -durante la sesión extraordinaria convocada para tratar su caso- se defendió y definió como víctima de una campaña en su contra.
Desde ese día, las expresiones de repudio hacia el ladrón confeso se suceden e incluso quienes lo apoyaron en principio -como los diputados oficialistas al abstenerse de votar para retirarle la investidura- ahora quieren poner paños fríos al asunto.