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“Hasta el cuello me llegó el agua”, contó a ABC Cardinal -aún conmocionado- Manlio Crerch, quien quedó dentro de su auto inmovilizado en medio de la enorme cantidad de agua que se acumuló en el túnel del superviaducto.
Relató que esta madrugada conducía bajo la tormenta y, justo en el momento más intenso, se disponía a atravesar el túnel, que ya estaba a oscuras a raíz de un apagón. “Lastimosamente, atropellé (el agua); estaba totalmente inundado”.
A raíz de la presión, no pudo abrir las puertas, mientras el agua estaba a punto de romper el parabrisas. “El agua empezó a subir, llegó hasta el cuello. Logré salir por un espacio, si no, no la contaba”.
Refirió que, tras salir del habitáculo, fue hasta una estación de bomberos pero se quejó de que no lo asistieron. Tras proveer los datos a un policía, llamó a una grúa para retirar su automóvil del agua. “El superviaducto es una trampa mortal. No le deseo a nadie lo que pasé”.
Dos rodados de la marca Mercedez Benz y otro de la línea Toyota fueron arrastrados por los raudales en Humaitá y Ayolas, zona céntrica de Asunción, informó Víctor Ruiz, periodista de ABC Color.
Uno de los Mercedez acabó con la cuatro ruedas hacia el cielo y el otro con la mitad de la carrocería en la vereda, mientras que el Toyota quedó a unos metros del automóvil tumbado.
Una gran cantidad de arboles cayeron en el microcentro de nuestra capital y también en barrios como Grupo Habitacional Aeropuerto, Zeballos Cué, San Gerónimo y Bañado Sur; en este último también innumerables casas se inundaron.