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Blas Ramos, fletero argentino, es uno de los que realizan el cierre de media calzada de la ruta Pilcomayo, en la frontera con Itá Enramada. La medida es para apoyar a los paseros paraguayos, quienes reclaman que hace un año salió el decreto presidencial por el cual se creaba la figura del pequeño importador, que supuestamente estaba dirigido a formalizar a los paseros. Según ese decreto, los comerciantes podrían traer hasta US$ 10.000 al mes en mercaderías, excepto las prohibidas; sin embargo, los paseros aseguran que el decreto nunca se cumplió.
Ramos dijo que no dejarán de cerrar media calzada, la que es utilizada por camiones que transportan carne, productos frutihortícolas y combustibles. Por su parte, Digna Cáceres, pasera paraguaya tambien presente en el lugar, lamentó la actitud del Presidente, a quien calificó de corrupto porque sólo favorece a los grandes empresarios. Criticó que Horacio Cartes no ponga atención a la situación de ellos y aseguró que seguirán con las medidas de fuerza hasta que reciban respuesta favorable.
Esta mañana, a tempranas horas, en Vista Alegre los paseros cerraron el paso a Clorinda generando una larga fila de automovilistas y quejas de los mismos. Según Zully Jacquet, una de las dirigentes, están saliendo a la calle porque ya no tienen opción. Dijo que recurrieron a las autoridades y pidieron audiencias, pero no reciben respuesta.