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El intendente de Caacupé Roberto Franco (ANR) querelló a la periodista Desiré Cabrera por difamación, calumnia e injuria y pide un resarcimiento de G. 1.000 millones, luego de que la corresponsal publicara una serie de artículos sobre las falencias en la administración de Franco, como por ejemplo el deplorable estado de las calles de la ciudad.
Franco ya había amenazado con demandar, pero las publicaciones no cesaron y ahora entabló una querella, ante lo cual la Coordinadora de Periodistas en Alerta, creada tras el asesinato de Pablo Medina, rechaza la acción del político, y la considera como un intento de amedrentamiento cuyo objetivo es acallar las denuncias.
"Toda autoridad pública debe someterse a las críticas ciudadanas, recogidas por los medios de prensa, que a veces interactúan como puentes entre la gente y las autoridades", señala parte del comunicado emitido esta tarde y resaltan que apoyarán todas las denuncias de corrupción.
Señala el escrito que los periodistas de la organización se mantendrán en alerta para apoyar a Desiré Cabrera y que exigen a las autoridades, protección para la misma ante cualquier situación de amenaza o violencia.