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La directora del colegio, Mirian Valdez de Servián, señaló que el hecho ocurrió el pasado lunes 15 del corriente y que se trataría de una broma pesada. “No podemos decir que fue un intento de secuestro porque lo que nosotros suponemos es que lo que quiso hacer el taxista fue una broma, pero muy pesada”, comentó.
La directora relató que en la cámara de seguridad constataron que a las 05:27 minutos (de la tarde del 15 de octubre) la portera del colegio estaba con un grupo de niños que aún no habían sido retirados de la institución por sus padres. En ese momento llega un taxista y empieza a llamar al único niño varón que estaba en el grupo con el nombre de "Leopoldo".
“Le dijo '¿vos no sos Leopoldo?' y el niño le dijo que no y luego le dio su nombre. Entonces el taxista le dijo que a él era a quien debía llevar. En ese momento la portera le mira y el taxista le hace una mueca como diciendo que se trata de una broma”, indicó.
Según la directora que recogió la explicación de la portera, el taxista luego señaló que venía en búsqueda de una profesora, que le había solicitado que le esperara junto a un portón marrón.
“La portera le explicó al taxista que a la vuelta de la institución hay un portón marrón que pertenece a una congregación de religiosas que suelen solicitar taxi. Refiere que el taxista fue pero luego volvió al colegio. La portera le reiteró que no había ninguna profesora en la institución y este le dijo que no encontró el portón marrón”, indicó la directora.
Agregó que desconocen cuáles fueron las intenciones y que es mentira que el chico corrió del taxista como se comenta. “La portera siempre acompaña a los niños hasta que se vayan todos. En las cámaras de seguridad no pudimos visualizar el número de chapa ni a qué parada pertenece el taxista. De todos modos intensificamos los controles y volvimos a solicitar que la Policía esté frente a la institución en los horarios de salida”, apuntó.
Un grupo de padres, por su parte, envió una nota a la monja que lidera la institución, la hermana Dolly Jara, en la cual señalan que pudo tratarse de un intento de secuestro "y no de un alumno previamente identificado, sino de cualquiera de ellos, lo que no es ajeno al ambiente que impera en nuestro país".
Los padres pidieron al colegio que promuevan "acciones conducentes a evitar la concreción de hechos como el mencionado".