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PEDRO JUAN CABALLERO. Decenas de familias tuvieron que abandonar sus hogares ante la crecida del río Apa, que divide esta ciudad fronteriza de la ciudad brasileña de Bela Vista. La últimas lluvias registradas en los últimos días empeoraron la situación de las familias afectadas en las riberas de ambas ciudades. Ante esta situación, muchas familias tuvieron que dejar sus hogares y refugiarse en lugares más altos o en casas de familiares.
Sin embargo, muchos se resisten a abandonar sus hogares tomados por el agua, por temor a que sus pertenencias sean robadas. Funcionarios de la ANDE realizaron el corte de energía eléctrica en los barrios ribereños a fin de evitar accidentes. La misma situación están viviendo decenas de familias en el lado brasileño. Esta inundación hizo que las familias afectadas perdieran, además de cultivos, muchos animales como vacas, ovejas y gallinas.
El intendente municipal de Bella Vista Norte, Miguel Louteiro (ANR), indicó que habilitó seis locales para recibir a las familias damnificadas y que en estos lugares se están realizando “ollas populares”. Destacó la solidaridad del pueblo de Bella Vista Norte, que ayudó en masa a las familias afectadas por esta inundación.
El intendente Louteiro informó que ya se pusieron en contacto con la Secretaría de Emergencia Nacional y que la ayuda ya estaría en camino. Cabe señalar que, además de la crecida del río Apa, las últimas lluvias dejaron los caminos del departamento del Amambay en situaciones que dificultan el tránsito vehicular.