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La iniciativa surge de Natalia Antola y Christian Ceuppens, quienes con carteles llamativos y textos grandes buscan crear conciencia, tanto al Estado paraguayo, como a los pobladores de la capital.
“Esta intervención urbana simplemente quiere, a través de sencillos pero llamativos pasacalles, hacernos recordar el valor de nuestro patrimonio arquitectónico, nuestro patrimonio urbano, imaginar nuestra ciudad feliz”, dice Natalia Antola, quien es arquitecta y se dedica a la restauración.
La profesional comenta que la iniciativa surge tras conversar con Ceuppens, quien también es arquitecto y representante del arte y busca que los edificios históricos, pese a que son privados, sean refaccionados.
“La mayoría de los edificios antiguos en los que se ubicaron los carteles son privados. Se debe tomar en cuenta lo que hacen otros países del mundo con sus centros históricos, que realmente aprecian lo que tienen”, dijo a ABC Color Natalia.
Ella expresó que los carteles fueron solventados con dinero de ambos y que tiene como fin crear conciencia en la protección del patrimonio histórico de Asunción para mejorar el aspecto de la capital.
Criticó la falta de respeto al valor histórico de los edificios, refiriéndose a los afiches con rostros de políticos que se pegan en sus paredes.
La arquitecta señaló que el simple acto de poner carteles en los edificios antiguos del casco histórico de Asunción despertó el interés de muchas personas, algunas que deseaban adquirir los edificios pero sin dinero suficiente, otras que desconocían la existencia de los mismos, entre otras reacciones.
Los carteles fueron ubicados en la tarde del sábado y desde allí tuvieron gran repercusión.