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En un debate encendido, autoridades educativas y expertos discutieron el proyecto de ley que propone prohibir totalmente el uso de teléfonos celulares, y otros dispositivos de comunicación en instituciones educativas del país. La iniciativa busca abordar los efectos de la tecnología en el desarrollo de los estudiantes, aunque genera posturas encontradas sobre su implementación.
El director de Paraguay Ciberseguro, Miguel Gaspar, defendió la prohibición, argumentando que los dispositivos electrónicos no están diseñados para niños.
“Estos dispositivos no fueron creados para niños. Aunque solo tengan un sistema operativo, como Android o iOS, tratan al usuario como adulto, recolectan información como adulto y estimulan el uso de plataformas como adulto”, sostuvo. Además, enfatizó que los dispositivos cuentan con hasta 80 sensores avanzados que recopilan datos constantemente, algo que considera inadecuado para menores.
Por otro lado, el director del Sindicato Nacional de Directores, Miguel Marecos, manifestó su desacuerdo con la prohibición total, pero abogó por un marco regulatorio desde el Ministerio de Educación.
“Debe buscarse un equilibrio para que la tecnología sea una herramienta educativa, enfocada en el desarrollo de competencias digitales y el máximo aprovechamiento para los estudiantes”, indicó.
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Lo que dijo el ministro de Educación
En tanto, el ministro de Educación, Luis Ramírez, propuso una postura intermedia, considerando la evidencia científica sobre los efectos negativos del uso excesivo de pantallas en el cerebro infantil.
“La pediatría recomienda reducir las pantallas a dos horas diarias. Los niños ya tienen suficiente exposición en casa, por lo que en la escuela el enfoque debe ser estrictamente pedagógico”, afirmó.
Ramírez planteó que hasta los 12 años no debería permitirse el uso de celulares en las aulas, y a partir de esa edad, su uso debería evaluarse según la necesidad educativa.