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En la noche de este jueves vecinos del barrio San Vicente de la ciudad de Pilar, denunciaron públicamente el estado de abandono en que vive un anciano de 70 años que carece de documento de identidad, sobrevive en una pieza sin luz ni agua en condiciones deplorables. Tras una cirugía de hernia, su salud se ha deteriorado drásticamente.
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Carlos Arellano (70), un hombre identificado por sus vecinos debido a la falta de documentos, enfrenta un abandono extremo en su vivienda, ubicada en la ciudad natal del vicepresidente de la República, Pedro Alliana. Vive en un cuarto oscuro, sin servicios básicos como agua potable o electricidad, dependiendo únicamente de la caridad de los vecinos.
Toribia Pérez, una vecina cercana, comentó que Carlos Arellano, fue sometido a una cirugía de hernia hace dos meses. Sin embargo, la operación derivó en complicaciones que dejaron al hombre con una bolsa de colostomía, la cual se encuentra rota y ha provocado que permanezca empapado en su cama, sin poder moverse ni recibir atención adecuada. “Ningún funcionario de la Unidad de Salud Familiar (USF) se ha acercado a revisar su estado, pese a las múltiples solicitudes”, denunció Pérez.
Las heridas quirúrgicas de Carlos Arellano no han recibido el seguimiento necesario, lo que agrava aún más su situación. Según los vecinos, el hombre necesita con urgencia atención médica especializada para evitar que su estado se deteriore aún más.
Lo que dice la Asociación de Adultos Mayores
La presidenta de la Asociación de Adultos Mayores, Cristina Ozuna, visitó el lugar para constatar la situación de Carlos. “Esto es inhumano. No podemos permitir que un adulto mayor viva en estas condiciones. Vamos a solicitar la intervención inmediata de la Duodécima Región Sanitaria y de las autoridades de Derechos Humanos”, afirmó Ozuna tras su visita.
La falta de asistencia a Carlos Arellano ha generado una ola de indignación en la comunidad, que considera inadmisible que, en la ciudad del vicepresidente de la República, Pedro Alliana haya ciudadanos viviendo en tales condiciones.
Los vecinos insisten en que es necesario que las autoridades locales y nacionales tomen cartas en el asunto de inmediato, antes de que esta tragedia termine de peor manera.
Mientras tanto, los vecinos continúan organizándose para buscar soluciones a corto plazo, en espera de que las autoridades de salud y derechos humanos respondan al llamado de auxilio de un hombre que ha sido completamente olvidado.
El director de la Duodécima Región Sanitaria, doctor Arnaldo Espínola se compromete que mañana enviará a funcionarios de salud para brindar asistencia a Carlos Arellano.