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El director del Hospital Regional de Encarnación (HRE), Jorge Ayala, informó de la atención de un menor de edad que sufrió una amputación traumática de la última falange del dedo anular derecho, debido a una explosión provocada por la manipulación de pirotecnia.
Se trataría de un niño de 8 años, oriundo del distrito de Coronel Bogado, en el departamento de Itapúa, quien fue derivado el 1 de enero hasta el HRE.
El médico lamentó la situación. Aunque no revistió gravedad, el resultado tiene consecuencias permanentes para el menor de edad.
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Desalientan uso de pirotecnia
Ayala reafirmó su compromiso con la campaña “Pirotecnia Cero”, en especial para menores, y, aunque no fue el caso, advirtió que las consecuencias pueden ser más graves en esta clase de accidentes.
El hecho fue comunicado a las autoridades de niñez y al Ministerio Público, para que se deslinde responsabilidades por presunta violación al deber del cuidado.