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En nuestro país, y en todo el mundo, se replicó lo que inició el Papa Francisco en la Noche Buena. En la ciudad de San Lorenzo, el Obispo de la Diócesis de San Lorenzo, Mons. Joaquín Hermes Robledo, inició el camino a la Indulgencia Plenaria con una penitencia seguida de una larga peregrinación hasta la Parroquia Catedral de San Lorenzo.
Mons. Robledo peregrinó junto a los sacerdotes y laicos, guiados por el símbolo de la Cruz, y la Santa Biblia. Cientos de fieles siguieron en procesión y oración por la calle Cnel. Romero hasta el templo. En la explanada se inició la Santa Misa, que fue presidida por Mons. Joaquín Hermes Robledo.
Durante la homilía, Mons. Joaquín Robledo pidió a los presentes tomar el ejemplo de la Sagrada Familia, y de la Virgen María. “El Papa Francisco dijo en el ángelus de hoy que la Sagrada Familia es el modelo para la familia de hoy, y es un modelo porque dialoga, porque sabe escuchar y dialogar. Esto puede resolver muchas situaciones, dijo el Papa Francisco en su homilía”, expresó monseñor.
“En nuestro país hay situaciones difíciles y muy dolorosas que pasan en nuestra familia. Como bien sabemos enfermedades, falta de trabajo, conflictos, separaciones dolorosas, violencias, crímenes, vicios, el flagelo de las drogas, las migraciones forzadas, familias en situación de pobreza, y de extrema pobreza. Estas situaciones constituyen un contraste con lo que significa ser familia de Dios, familia de Jesús, José y María”, refirió Monseñor Robledo.
“En la Bula de convocación del Jubileo 2025 escribió el Papa, la esperanza nos encuentra en la madre de Dios, su testimonio más alto, al pie de la cruz, mientras veía a Jesús inocente sufrir y morir, y aún atravesada por el profundo dolor repetía su sí sin perder la esperanza, sin perder la confianza en el señor. Le pedimos a la virgen María en este año Jubilar, sepamos vivir con esperanza, sepamos vivir la fraternidad, la reconciliación, el amor y la paz, que contemplando la sagrada familia valoremos el amor que Dios no tiene”, expresó en su mensaje a los fieles Mons. Joaquín Robledo.
Al término de la misa, el obispo de San Lorenzo, Mons. Joaquín Hérmes Robledo, abrió las puertas del templo de la Catedral como símbolo de esperanza para que los fieles católicos puedan alcanzar la Indulgencia Plenaria. A su paso, los cientos de peregrinos cruzaron las puertas para orar y pedir a Dios el perdón de todos sus pecados.