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La jefatura regional de la Administración Nacional de Electricidad (ANDE), cuyo responsable es Óscar Céspedes, informó que uno de los alimentadores de la estación de Villalbín y la subestación de Pilar estaban fuera de servicio, lo que agravó la situación.
En una reciente entrevista con ABC Color, Óscar Céspedes, había mencionado que muchos de estos alimentadores tienen más de 40 años de antigüedad, lo que evidencia la urgente necesidad de modernizar el tendido eléctrico y reemplazar los transformadores obsoletos.
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Indignación en las redes
La falta de energía generó una ola de críticas en redes sociales. “Qué linda Navidad nos regala la ANDE, además de la abultada factura”, expresó un usuario en tono irónico. Otro internauta reclamó: “Para enviar la factura son rápidos, pero para solucionar los problemas son lentos”.
Aunque el servicio eléctrico fue restablecido, otros servicios como el internet permanecieron fuera de funcionamiento, afectando la comunicación y el trabajo de los comerciantes.
La falta de inversión en la infraestructura eléctrica de Ñeembucú, sumada al impacto de estos cortes en la vida cotidiana, pone en tela de juicio la gestión de las autoridades locales y nacionales. Los reclamos no solo exigen soluciones inmediatas, sino también un plan integral para garantizar un suministro confiable en una región de vital importancia estratégica para el país.