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Una época que debería ser feliz, pero no lo es tanto para los médicos del Centro Nacional de Quemaduras y Cirugías Reconstructivas (Cenquer), quienes ya comienzan a preocuparse por el panorama que se presentará en estas fiestas con respecto a los niños afectados por lesiones producto de la pirotecnia.
El doctor Saúl Zaputovich, director del nosocomio especializado en quemaduras, dejó en claro su postura con respecto a que los menores no deberían utilizar este tipo de explosivos.
Sin embargo, teniendo en cuenta que también es un negocio para muchas personas en esta época, el médico explicó cómo, en último caso, debe darse el uso de estos explosivos.
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Si no puede evitar usarlos, haga esto
Según el doctor Zaputovich, si se insiste en utilizar un explosivo, este debe ser manejado por un adulto, lejos del grupo de personas y en un espacio descampado. De ninguna manera puede activarse el artefacto pirotécnico en un lugar techado.
Los niños y adolescentes no pueden estar cerca del explosivo en cuestión.
Este año, la campaña de prevención del Cenquer tiene el lema “Celebremos con tradición, paz y amor, sin bombas ni dolor”.
“Si hay un niño quemado, hay un adulto responsable”
El médico recordó que el 80% de los quemados en épocas de fin de año son los niños. En este sentido, enfatizó que “si hay un niño quemado, hay un adulto irresponsable”.
Además, resaltó, la pirotecnia es el evento más prevenible, pues en el 99,9% de los casos se pueden evitar.
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Aunque reconoció que el porcentaje de accidentados disminuyó, no es en la proporción que les gustaría.
Por lo mismo tratan de crear conciencia, recordando que cambia la vida para siempre por un minuto de probar la pirotecnia. “Acá no estamos siendo dramáticos ni inventando cosas, realmente algunos niños no pueden volver a agarrar una cuchara o un lápiz para escribir”, expresó el doctor.
“La pólvora inocente no existe”
Saúl Zaputovich puntualizó que “la pólvora inocente no existe, pues hay mucho material inflamable en el ambiente, incluso la ropa se combustiona y contribuye a las quemaduras. Una chispita produce un fogonazo”.
Una combinación muy peligrosa que el doctor advirtió que no se debe hacer es la del uso de pirotecnia y bebidas alcohólicas. Esto se debe evitar a toda costa porque las personas en estado etílico no miden la gravedad de sus actos y así es como ocurren los accidentes.
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El año pasado, entre Navidad y Año Nuevo se internaron en el Cenquer 10 pacientes. Eso sin contar a los ambulatorios, que reciben curación de sus heridas y pueden volver a su casa.
Como un punto muy importante, el médico pidió a las autoridades municipales regular los puestos de venta de pirotecnia, pues los artefactos se mojan con lluvias, se secan al sol y se vuelven a vender, y esos son los que después presentan fallas.
Qué hacer cuando ya ocurrió la quemadura
Si llegara a ocurrir una quemadura, no se debe agredir la piel más de lo que ya sufrió. Esto significa no aplicar ningún tipo de producto que a usted le parezca que le dará alivio.
Lo único que se recomienda es poner la herida bajo el chorro de la canilla a temperatura ambiente y envolverse con un paño limpio, para dirigirse inmediatamente al centro asistencial más cercano.