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La falta de agua potable es un problema frecuente en esta ciudad, inclusive en invierno, y en la temporada de calor es posible que se agudice la falta del líquido por el uso excesivo por parte de los pobladores, quienes también denunciaron la ampliación masiva de usuarios, sin que se tenga capacidad para cumplir con el compromiso.
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Las autoridades de la Junta de Saneamiento priorizaron las mejoras en infraestructura administrativa, pero el servicio esencial que es la distribución de agua potable sigue en forma deficiente.
En ese sentido, Juan Carlos Mieres dijo que los recursos invertidos en la modernización de las oficinas administrativas no se reflejaron en la distribución de agua, generando descontento entre los usuarios, quienes ven la disparidad en cuanto a criterios para la priorización de los servicios.
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Una usuaria identificada como Paola Mendoza aseguró que hace más de 15 días que no tienen agua durante el día y que juntan de madrugada para poder disponer de algo de líquido para algunos quehaceres domésticos. “Es un verdadero padecimiento la falta de agua, para la gente que no tenemos tanque u otra forma de almacenamiento”, expresó.
Mientras que Osvaldo Cristaldo aseguró que la cantidad de usuarios está sobrepasando la capacidad de abastecimiento y que, además, muchos cuentan con motor que extrae el agua desde 300 a 400 metros, perjudicando a otros.
El presidente de la Junta de Saneamiento, Ariel Arzamendia, aseguró que el problema será solucionado en breve porque se está cambiando la electrobomba, ya que se quemó recientemente.
Arzamendia negó que hubiera ampliación y que solamente se puso una canilla comunitaria.