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En comunicación con ABC Cardinal este jueves, el titular de la Secretaría de Emergencia Nacional (SEN), Arsenio Zárate, brindó una actualización sobre la situación en el norte del Chaco, donde bomberos, militares y funcionarios del Gobierno continúan combatiendo un nuevo incendio forestal que se inició esta semana, no muy lejos del área de la reserva natural del cerro Chovoreca.
El ministro Zárate afirmó que el nuevo incendio, detectado a principios de esta semana, “todavía no está controlado como queremos”, pero está “estabilizado” y “no avanza” en la medida que podría.
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Dijo que el incendio de esta semana ya afectó a más de 20.000 hectáreas de tierras.
El siniestro de las semanas anteriores en las inmediaciones y parcialmente dentro de la reserva del cerro Chovoreca destruyó más de 180.000 hectáreas, por lo que el daño acumulado por los dos incendios supera las 200.000 hectáreas.
Señaló que el nuevo incendio no está “tan cerca” de la reserva natural, pero enfatizó que esa área protegida “está en peligro”.
Sospechan de otro incendio provocado
Comentó que en horas de la madrugada de hoy se sumaron a los trabajos en el norte de Alto Paraguay bomberos voluntarios adicionales y que la cantidad de personal abocado a las tareas de combate al siniestro es de más de 100, entre bomberos, efectivos de las Fuerzas Armadas, funcionarios de la SEN y empleados de las estancias de la zona.
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El ministro Zárate indicó que, aunque la hipótesis aún no ha sido confirmada, hay una sospecha “enorme” de que, al igual que el masivo incendio de las semanas pasadas, este nuevo siniestro habría sido provocado, posiblemente por actividades de quema de “escollera”, restos de plantas que suelen ser acumulados y quemados en establecimientos ganaderos a modo de “limpieza” de campos para pastoreo.
Indicó que, en paralelo a cualquier proceso judicial que pueda iniciar el Ministerio Público, la SEN está instando al Instituto Nacional Forestal y al Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible a tomar acciones administrativas, que pueden incluir multas de hasta 20.000 jornales mínimos para los responsables de las estancias donde se originan incendios forestales.