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Las peritos María Eugenia Benítez Cabrera y Lourdes Rejala Barrientos fueron denunciadas por supuesto testimonio falso, falsificación de documentos públicos y uso de documentos públicos de contenido falso, por parte de la escribana Olga Beatriz Denis Filippini y Julio César Gavilán Velaztiquí, a quien una mujer fallecida durante la pandemia incluyó en su testamento como beneficiario de la quinta parte de sus bienes.
Junto a la denuncia los accionantes presentaron una copia del testimonio de la escribana pública Olga Beatriz Denis Filippini (denunciante), donde consta el acto de testamento, a través del cual la Sra. Ida Julia González Viuda de Hermosilla instituyó como heredero en la proporción del 20 por ciento todos sus bienes (la quinta parte), al también denunciante Julio César Gavilán Velaztiquí, quien no estuvo presente, ni estaba al tanto de la celebración del acto testamentario.
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El acto testamentario se llevó a cabo el 19 de agosto de 2017 ante la escribana Pública Olga Beatriz Denis Filippini, quien dos días antes había solicitado a la Sra. Ida Julia González Vda. de Hermosilla un certificado médico que avale que la testante se hallaba en condiciones de salud suficientes para realizar el acto. Dicho documento fue expedido el 17 de agosto de 2017 por el Dr. Nelson Walder, con Registro N° 2791, quien certificó que la mujer se hallaba en buenas condiciones de salud física y mental.
Tras la lectura del contenido del documento, en presencia de tres testigos la Sra. Ida Julia González Vda. de Hermosilla rubricó el testamento con su firma y, como medida de seguridad que le fue solicitada, estampó la impresión de su huella dactilar, en prueba de su presencia irrefutable en el acto jurídico, según puntualiza la denuncia.
Juicio de sucesión y presunta falsificación de documentos
Posterior al fallecimiento de la Sra. Ida Julia González Viuda de Hermosilla, en el año 2021 se inició el juicio de sucesión de la misma ante el Juzgado de Primera Instancia en lo Civil y Comercial del 21° Turno Secretaría 41 de la Capital, a cargo del juez José Miguel Villalba Báez.
El magistrado incorporó al expediente el testimonio del acto testamentario debidamente inscripto en la Dirección General de los Registros Públicos, el cual fue atacado de falso por parte de los hijos de la fallecida, quienes cuestionaron la firma y la comparecencia de la mujer en el acto de testamento.
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Según puntualiza la denuncia, ante esta situación el juzgado sometió a pericia, tanto la firma como la huella digital de la causante. La pericia de la rúbrica estuvo a cargo del perito calígrafo Lic. Librado Ramón Sánchez, quien reconoció como auténtica la firma de la Sra. Ida Julia González Viuda de Hermosilla; mientras que el perito dactiloscópico-criminalístico Mg. Walter Daniel Sánchez Duarte certificó la validez de la huella digital de la fallecida.
Sin embargo, los dictámenes periciales realizados por las denunciadas María Eugenia Benítez Cabrera y Lourdes Rejala Barrientos, concluyeron que la firma inserta en la escritura pública no era auténtica, resalta otra parte de la denuncia presentada ante el Ministerio Público.
Peritos indujeron a jueces al error, según denuncia
Los accionantes señalan en el escrito que claramente las peritos denunciadas concluyeron con falsedad que la firma inserta en el testimonio no le corresponde a la Sra. Ida Julia González Vda. de Hermosilla, quien “en vida no solo dejó su impresión digito pulgar derecho y su firma al pie del referido instrumento público, sino que además estuvo acompañada de su abogado de confianza y familiares de éste, como testigos del acto”.
Agregan que para concretar sus hechos ilícitos las denunciadas se valieron de artilugios y engaños técnicos, los cuales como mínimo indujeron a los jueces al error de apreciación de las pruebas y con ello fue impugnado un acto de voluntad real, cumplido con todas las formalidades legales y mayores medidas de seguridad como ser la impresión digital, firmas de testigos calificados y otros.
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“El trabajo de las peritos denunciadas, quienes concluyeron falsamente que la firma inserta en la escritura pública no correspondía a la Sra. Ida Julia González Vda. de Hermosilla, fue trascendente para fundamentar el argumento de los jueces, quienes concluyeron con ligereza que la firma no fue estampada por la mujer fallecida”, según los denunciantes.
Beneficiado era empleado de confianza
Parte de la denuncia indica que existen numerosos mensajes de los propios hijos de la testante que corroboran que la misma tenía un aprecio especial en favor del denunciante, quien en vida le demostró lealtad a la Sra. Ida Julia González Vda. de Hermosilla, en el manejo de la Aguatenía González y Gamarra S.R.L en las ciudades de Luque e Itá, que en un 50% le correspondía a la mujer; y la Aguatería Ypati 2, de la ciudad de Villa Elisa, que le correspondía en un 100% como propietaria.
“La lealtad llegó a tal punto que el Sr. Julio César Gavilán Velaztiqui fue el único en asistir a la testante en época de pandemia, teniendo en cuenta que la llevó al hospital y también la asistió durante el tiempo de su internación. Tras su muerte, se encargó de retirar el cuerpo, prepararla y trasladarla para su cristiana sepultura”, remarca parte del escrito.
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Finalmente indican que esta situación motivó hasta el agradecimiento de los hijos de la fallecida, quien durante el acto testamentario, delante de los testigos, expuso su intención de legar o reconocer al ahora denunciante, “legado que no pudo concretarse en paz, por la falsa conclusión de las denunciadas”.