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René Alfonso, poblador de Mariscal Estigarribia, Chaco, describió la situación que atraviesan los pobladores de la región occidental del Paraguay, considerando la sequía que hace varios meses atraviesan, a la que hoy se suman un incendio de hace tres días y una intensa humareda.
“Acá nosotros estamos con, parece una película de terror la situación en la que estamos porque en realidad el incendio está más al norte, más arriba, entre Bolivia y el límite de Paraguay con la zona de Chovoreca, pero acá en Mariscal es el que está recibiendo gran parte de la humareda con el viento norte. Es fuertísimo, porque desde que amanece hasta el otro día continúa, hace dos o tres días que estamos con este frente de viento norte y la humareda”, describió.
Dijo que casi todos los pobladores están encerrados en sus casas y apenas salen a veces para realizar lo necesario, como las compras en las despensas.
“Nosotros gran parte de la gente estamos encerrados en la casa, no vas a ver gente caminando, o sea, por necesidad, probablemente salgan a hacer búsquedas de los almacenes, pero por ahí nadie está saliendo de la casa, están todo encerrados la gente. Esto está terrible, o sea, nosotros tenemos criatura pequeña y lo que hacemos es tratar de que nos salga”, indicó.
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Incendio y sequía en el Chaco
René contó que están aproximadamente entre 200 y 300 km de Alto Paraguay, departamento donde se ubica el Cerro Chovoreca, y destacó que la característica de la zona es la velocidad del viento norte, la cual llega a registrarse entre 70 y 100 km/h.
“Ya pasó la importante lluvia que estábamos esperando en estos tiempos, en estos días, pero esperamos que septiembre no nos abandone y que por lo menos caiga una lluvia antes de que nos abandone, porque después ya entramos en época de espera de lluvia que va a ir a unos cuantos meses”, refirió.
Dijo que en la zona registran una sequía acumulada de siete meses sin lluvia, lo que implica varios problemas, más allá del humo que en sí es crucial por el aire que respiran, la gente y las comunidades están sin agua potable, e incluso en algunas comunidades indígenas están también sin alimentación, porque nadie puede cultivar.
“Lo que se genera en siete meses de sequía, más allá de la pérdida de agua y la posibilidad de tener el acceso a agua potable, es que se genera una suerte de combustible y cualquier fueguito que caiga esto incendia, o sea, es terrible de cualquier cosita, entonces también la gente inclusive las comunidades indígenas y nosotros hacemos todo el intento de cuidar para que esto no se produzca”, explicó.
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Sequía e incendio en el Chaco: asistencia no llega a todos
René Alfonso contó que saben del esfuerzo que instituciones del Estado, como la Secretaría de Emergencia Nacional (SEN) está haciendo y que llega a la zona de Presidente Hayes, en la zona de Bajo Chaco, con el ejército, pero no cubre todo.
“Yo creo que hay que solicitar a la ciudadanía, que vea como ayudar en este proceso, porque nosotros, la zona alta de Paraguay, acá en el Chaco el tema de agua es vital, o sea, cuando se comienza a terminar esto, no es que te vas corriendo al río Paraguay y traes digamos, o sea, no hay”, afirmó.
Contó que hace un mes aproximadamente la SEN llevó víveres a Mariscal Estigarribia y otras comunidades hacia la frontera, pero agua no llegó, la misma llega solamente hasta Pozo Colorado y toda la zona intermedia de Irala Martínez.
“La asistencia en materia de agua llega hasta Chaco central, la asistencia en alimentación, llegó hace un mes y medio en la zona de Boquerón, zona Chaco alto y este es el momento porque generalmente estos kits de alimentación que envía la SEN es de 15 días y eso para las familias. Yo decía que es el momento de reforzar el tema agua, agua potable para tomar y reforzar la alimentación porque no hay nada, la sequía ha quemado todo lo que se pueda plantar en el campo”, lamentó.
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Incendio en el Chaco: preocupan comunidades indígenas
Al ser consultado sobre las gestiones de los municipios locales y las gobernaciones, respondió que generalmente las autoridades locales esperan la asistencia del gobierno central.
“Nosotros sabemos que el municipio de alguna otra forma está asistiendo con su camión tanque llevando agua en los pozos, pero este es el momento que ya casi todos los cauces hídricos que teníamos, tajamares y demás, se han secado y es el momento donde la pregunta es llevar agua podrida, agua golpeada, agua mala en los aljibes de las comunidades o no, esa es la pregunta, entonces estamos en un momento crítico en términos hídrico en términos de aire y en términos de la posibilidad del incendio”, recalcó.
Agregó que en la zona de Chovoreca viven comunidades indígenas Ayoreos silvícolas, en situación de no contacto y no saben qué está pasando con ellos.
“Tenemos algunos reportes de algunos indígenas que están ayudando en la zona tratando de monitorear la situación, pero no sabemos cómo están ellos, hay mucha cuestiones que hay que ver como el Estado trata de reaccionar y bueno y enviar una contingencia de gente que pueda comenzar a ayudar y acá en la zona nosotros necesitamos, por lo menos tener algunas orientaciones en términos si usamos o no tapabocas, si dejamos los chicos salir, si continúa la escuela”, refirió.
Por último, dijo que la situación de los incendios y humareda que invade la zona es algo nuevo en los siete años que vive en Mariscal Estigarribia y que incluso otros pobladores le mencionaron.