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En comunicación con ABC Cardinal este lunes, el fiscal Rodolfo Colmán brindó detalles de la investigación de la muerte por abuso sexual de una niña de poco más de un año de edad que fue reportada el pasado fin de semana en el departamento de Itapúa.
Los padres y la abuela de una menor de un año y tres meses de edad fueron detenidos el pasado sábado en Coronel Bogado, Itapúa, luego de que llegaron al hospital de esa localidad con el cuerpo sin vida de la menor, que mostraba rastros obvios de haber sufrido abuso sexual que, según determinaron los médicos, le causó la muerte.
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El fiscal Colmán relató que los tres adultos llegaron al nosocomio desde Encarnación y llegaron solicitando asistencia “como si (la niña) estuviera viva”, pero luego afirmaron que la bebé murió en el camino.
Sin embargo, los médicos constataron que “los signos no eran de una muerte muy reciente”, por lo que convocaron al fiscal Colmán, quien a su vez pidió por un médico forense para realizar una inspección que dejó en evidencia los rastros de abuso sexual.
“Era obvio por la gravedad de las lesiones”, dijo.
“Mentiras, silencios absolutos, contradicciones”
Indicó que, al momento de ser inspeccionado, el cuerpo presentaba signos cadavéricos como rigidez, que normalmente se presentan entre cuatro y cinco horas después del deceso.
El agente del Ministerio Público comentó que los padres y la abuela de la niña entraron en “mentiras, silencios absolutos, contradicciones” e intentos obvios de desviar la atención cuando fueron interrogados, por lo que se dispuso su detención.
En relación al mismo caso, se llevó a cabo hoy un allanamiento –a cargo de la fiscala María del Carmen Palazón- a un burdel en Encarnación, que resultó en la detención de la dueña del establecimiento y uno de sus empleados, bajo sospecha de que ambos prestaron asistencia a los familiares de la niña para encubrir el crimen.