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El subjefe de la Comisaría Primera de Caacupé, comisario Herminio Gamarra, detalló que los controles y decomisos de caños de escape que fueron destruidos hoy fueron realizados atendiendo incesantes denuncias de pobladores.
Los caños de escape fueron destruidos dando cumplimiento de la Ley Nº 6390 que regula la emisión de ruidos que afectan el bienestar o dañan la salud de personas o seres vivos. La normativa debe ser cumplida para asegurar la debida protección de la población, del ambiente y de los bienes afectados por la exposición a los ruidos, explicaron los responsables del operativo.
Explicó que antes de llegar a este punto, primeramente retienen las motocicletas y solo las devuelven una vez que el conductor retire el caño de escape que causa ruidos ensordecedores. “Si eso no se da, le sacamos nosotros”, dijo.
Indicó que desde mayo, junio y julio encontraron numerosos conductores que infringieron la ley que establece los niveles permitidos, por lo que se incautaron los caños de escape.
“Este trabajo se realizó con una aplanadora de la Municipalidad. Se eliminaron 30 caños de escapes que se tenían en la Comisaría Primera y 10 que fueron incautados por la Policía Municipal de Tránsito Caacupé”, indicó Gamarra.
“Esto haremos cada vez que reunamos cierta cantidad de caños con el fin de concienciar a la gente a no utilizar más estos elementos que causan la polución sonora”, enfatizó el comisario Gamarra.
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Con este tipo de procedimientos, los agentes de la Comisaría Primera de Caacupé y la administración comunal buscan concienciar a los motociclistas sobre los daños ambientales que producen los molestosos ruidos generados por los conocidos como “roncadores”, que le colocan a sus móviles en perjuicio de la salud de los ciudadanos.