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El director general interino Raúl Doria y el director médico Gustavo Ocampos firmaron una circular mediante la cual dejan sin efecto otros dos emitidos para prohibir la prescripción de medicamentos y estudios no disponibles en el hospital del Cáncer.
“Siempre fue la intención ordenar, pero jamás prohibir. Pero obviamente se malinterpretó en los medios (...) Quiero aprovechar esta oportunidad para sinceramente disculparme y pedir perdón a todos los pacientes y familiares que hayan pasado un mal rato debido a esta circular”, expresó el doctor Doria en ABC TV esta mañana.
Con respecto al pedido de pacientes de ampliar la disponibilidad de medicamentos, señaló que tienen un listado básico de 64 fármacos oncológicos y están en proceso de incorporar tres más. “Pero en realidad en el Incan estamos ya adquiriendo cinco medicamentos que no están en el listado, con licitaciones que están saliendo en este periodo”, agregó.
Señaló que esos fármacos que se van a sumar están registrados en el Paraguay y fueron los más solicitados mediante recursos de amparo presentados el año pasado. “Y así cada vez más vamos a ir aumentando según necesidad. Este es un proceso administrativo largo y hay que adjudicarle presupuesto a cada medicamento que se van incorporando”, señaló.
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Con respecto a los estudios médicos, señaló que se aclaró en una circular que la indicación guardaba relación a estudios laboratoriales patológicos que no están disponibles ni siquiera a nivel país y algunos médicos estaban emitiendo órdenes al respecto. “Y lo llevaban a amparo y para el sistema era imposible conseguir esos estudios porque no hay en el país y normalmente eso se envía afuera y no teníamos posibilidad administrativa de hacerlo de esa forma”, agregó.
Sobre los dos tomógrafos averiados, señaló que uno ya fue puesto a disposición nuevamente y el otro está en proceso. Dijo que cuentan con tres unidades de este equipo.
Buscaban poner orden, alega director
El titular del Incan señaló que con la circular emitida lo que buscaban era poner orden. “Porque actualmente hay medicamentos por recursos de amparo que se entregan a pacientes y nosotros no tenemos posibilidad de tener una trazabilidad de esos medicamentos”, manifestó.
Agregó que generalmente se enteran de los recursos de amparo mucho tiempo después de que ya empezó el proceso, cuando se cambia de medicamento porque no funcionó o porque el paciente ya falleció y sus familiares llaman para devolver los fármacos que no se llegaron a utilizar.
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“La intención es poner orden y tener trazabilidad del proceso de medicamentos que no están registrados en el país. No se habla de los que están escaseando en el Incan, se habla de los que tenemos disponibles o que nuestro stock bajó a un estado crítico, se trata de medicamentos que no está en el país”, insistió.
Incan, con stock crítico “todo el tiempo”
En otro momento, el titular confirmó que constantemente están en situación de stock crítico, sobre todo en el caso de dos a tres medicamentos. “La farmacéutica que tiene ese medicamento no dispone de esos medicamentos y lo están trayendo. En la mayoría de los casos no nos quedamos con stock cero, siempre tenemos de reserva”, aseguró.
Alegó que en la mayoría de los casos se debe a problemas administrativos y no “por escasez”.
Limitación de recursos, un problema diario de los médicos y pacientes
La prohibición generó ayer una ola de cuestionamientos desde distintos sectores políticos y científicos. El Círculo Paraguayo de Médicos emitió un duro comunicado en el cual señalan que la disposición limitó el accionar médico, desatendiendo el criterio profesional y la aplicación de medidas o protocolos terapéuticos para tratar la patología que aqueja al paciente.
“Esto se traduce en un servicio profesional antiético e inconcebible, pues atenta contra los principios éticos en general y el juramento hipocrático en particular”, enfatizaron los médicos.
Además, señalaron que las decisiones de prescribir un tratamiento o estudios a un paciente se toman con base en el consenso multidisciplinario de especialistas. “Condicionar tal medida crucial para la evolución a autorizaciones se opone al criterio científico”, mencionan.
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Además, señalan que los pacientes merecen y requieren de la posibilidad de buscar en otros sectores los estudios y medicamentos que no están disponibles en una institución. “Un especialista certificado debe solicitar aquello que corresponde, respecto al diagnóstico y terapéutica, aunque debemos aceptar que es propio de nuestra realidad médica la limitación de recursos, sobre todo en patologías complejas”, lamentó.
“El médico tiene como eje de su accionar el no hacer daño. Si el mismo no indica los estudios y medicamentos correspondientes para lograr un diagnóstico preciso y certero, atenta contra este principio”, enfatizaron.
También destacaron el aspecto legal, puesto que los médicos y directivos del hospital se exponen a una responsabilidad penal en caso de que el paciente pierda la vida por no haber recibido el medicamento necesario.