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El 28 de marzo del año 2013, en su primera misa crismal de Jueves Santo en la Basílica de San Pedro, el papa Francisco había exhortado a los más de 1.600 sacerdotes que estuvieron en aquella celebración a “ser pastores con olor a oveja”. Siguiendo ese camino, Mons. Ricardo Valenzuela inició su visita pastoral en la ciudad de Eusebio Ayala llevando mensajes de paz y amor.
Los pobladores de la zona y la comisión de la parroquia San Roque lo recibieron con entusiasmo demostrándole el gran afecto. En este encuentro también se hicieron presentes familias de diversas comunidades, quienes fueron acompañados de sus hijos con carteles de bienvenida para saludar al obispo.
La visita pastoral inició el sábado 15 de junio en el templo parroquial San Roque de Montpellier. En el lugar lo recibieron el párroco Natividad Olmedo, el intendente municipal Víctor Martínez (ANR), los niños y catequistas de la comunidad.
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Durante la misa de acción de gracias monseñor Valenzuela resaltó que las visitas pastorales se realizan con el objetivo de fortalecer la fe en las familias. Destacó la importancia de enseñar a los hijos a orar desde pequeños para que tengan ese sentido de pertenencia y acercamiento al Señor.
Agradeció el respeto, cariño y alegría que recibió de los pobladores barrereños e instó a los fieles a seguir fomentando la religiosidad en las parroquias.
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Admiró el trabajo de los curtiembreros
En su recorrido, monseñor Valenzuela llegó al barrio industrial San Roque, dónde conoció a los curtiembreros, quienes se encargaron de explicarle el procedimiento de los trabajos en el cuero.
Esta visita se desarrolló con el acompañamiento del presbítero Natividad Olmedo y vecinos de la zona. En el sitio también se pudo observar el entusiasmo de personas de diferentes edades, que incluso llegaron de ciudades aledañas como Isla Pucú y Primero de Marzo para saludar al obispo.
Los artesanos compartieron con los presentes cómo se elaboran las camperas de cuero e incluso monseñor se probó una de estas.
En esta esta semana también se prevé la visita en la Municipalidad local, el Centro de Salud y la Comisaría. Luego continuará con el recorrido a las escuelas, clubes, capillas y otras instituciones de la ciudad.
La feligresía católica de esta localidad cordillerana honra al santo patrono San Roque cada 16 de agosto. Esta comunidad se encuentra a unos 72 km de Asunción. Es muy conocida por ser la cuna del célebre chipá Barrero y por estar ubicada junto a los campos de Acosta Ñu, donde se libró la más cruenta batalla durante la Guerra contra la Triple Alianza.