Celular para Tío Rico: Fiscalía acusa a militar, su esposa y a exabogado de Miguel Insfrán

Los fiscales Francisco Cabrera y Verónica Valdéz acusaron por presunto soborno agravado y otros hechos, y pidieron juicio para el coronel Luis María Belotto Quiñónez, su esposa Alba Lidia Ale de Belotto y al abogado Miguel Ángel Mendieta Fernández, exdefensor de Miguel Ángel Insfrán Galeano, alias Tío Rico. Los encausados habrían intentado hacer llegar un celular al sindicado como narcotraficante en el caso “A Ultranza”, hasta su celda en la Prisión Militar de Viñas Cue.

Miguel Ángel Insfrán, alias "Tío Rico", aguardando su audiencia de imposición de medidas en el Palacio de Justicia, junto a su abogado.
Miguel Ángel Mendieta junto a su excliente Miguel Ángel Insfrán, alias "Tío Rico".Fiona Aquino

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Los fiscales de la Unidad Especializada en Delitos Económicos y Anticorrupción (UDEA) Francisco Cabrera y Verónica Valdez presentaron anoche su requerimiento conclusivo acusatorio contra el coronel Luis María Belotto Quiñónez y su esposa Alba Lidia Ale de Belotto, por los hechos punibles de soborno agravado en calidad de coautores, mientras que contra el abogado Miguel Ángel Mendieta Fernández, lo hizo por el ilícito de soborno agravado en calidad de autor e instigador, por intentar hacer llegar un celular a Miguel Ángel Insfrán Galeano, alias Tío Rico, acusado en el marco del caso A Ultranza.

En ese marco del proceso penal, los representantes del Ministerio Público solicitaron al juez penal de garantías Especializado en Delitos Económicos, Humberto Otazú, que la causa caratulada como “Luis María Belotto y otros s/ soborno agravado” sea elevada a la instancia de juicio oral y público.

La causa penal fue iniciada en junio de 2023, por el agente Francisco Cabrera y el entonces fiscal y hoy juez de Garantías Especializado contra el Crimen Organizado Osmar Legal. Esto luego de que se haya intentado introducir de forma irregular, dentro de una caja de yerba, un teléfono celular que fue enviado por el abogado Miguel Mendieta.

Sobre la conducta del abogado Mendieta, el fiscal Cabrera había señalado que “se requiere que la persona produzca el dolo en la otra persona, en este caso la conducta que le atribuimos a Mendieta es la creación del dolo en el coronel Belotto para el ofrecimiento del celular al militar”.

Coronel Luis María Belotto y su esposa Alba Lidia Ale.
Coronel Luis María Belotto y su esposa Alba Lidia Ale.

Abogado de Tío Rico intentó declinar “moral” de militar con dinero

Según el relato de hechos expuesto por los fiscales en el escrito acusatorio, el 25 de mayo de 2023 Miguel Ángel Insfrán Galeano, alias Tío Rico, ingresó en carácter de recluso al Penal Militar de Viñas Cue. En esa misma fecha, a las 17:19, el abogado Miguel Ángel Mendieta Fernández contactó con el coronel Luis María Belotto Quiñónez a través de mensajes por WhatsApp.

Entre los primeros mensajes intercambiados entre Belotto y Mendieta, quienes eran amigos, este último le pidió averiguar cómo podía hacer para hablar con su cliente, en todo caso los horarios de visita.

El 26 de mayo, el abogado Miguel Mendieta fue al penal donde está Tío Rico y poco después del mediodía se retiró de ahí. Sin embargo, antes de retirarse había conversado con el Mayor Guillermo Moral, a quien entregó encomiendas para su cliente y también, aprovechó para ofrecerle la suma de G. 10.000.000, a lo que el militar le dijo que no podía recibir dinero bajo ningún concepto.

Posteriormente, Miguel Mendieta se volvió a comunicar con el coronel Luis Belotto para pedirle reunirse. A las 17:56, el militar le avisó al abogado que ya se encontraba en su domicilio. Una vez reunidos, Mendieta le pidió a su amigo Belotto si podía intermediar con el Mayor Moral haciéndole entrega de un sobre con dinero y un teléfono iPhone, a modo de que entregue esto último en forma clandestina al recluso Tío Rico.

Coronel y esposa insistieron en entregar celular a Tío Rico

Tras la reunión que mantuvieron Miguel Mendieta y Luis Belotto, este último se comunicó vía telefónica a las 21:40 con el Mayor Guillermo Moral Centurión, pidiéndole reunirse en un surtidor del emblema Shell, sobre la avenida Artigas y Primer Presidente. El Mayor Moral accedió a encontrarse con Belotto.

A las 21:55, llegaron a la estación de servicios el coronel Luis Belotto y su esposa Alba Lidia Ale de Belotto, a bordo de una camioneta Toyota Hilux roja. Del rodado bajó Belotto y fue hasta donde estaba el Mayor Moral, a quien hizo entrega del celualr iPhone que se encontraba en su caja para hacerle llegar a Miguel Insfrán, y de un sobre con fajos de dinero. A lo que Moral se negó a recibir.

Tras el rechazo al coronel Belotto, fue su esposa la que entró en acción. La mujer se dirigió hasta el Mayor Moral y le consultó porqué no quiso aceptar el dinero, ya que que le sería de ayuda. Sin embargo, ella recibió otro rechazo. Finalmente ante la negativa de Moral de aceptar el dinero, Belotto le dijo que está hecho el pedido y que tanto el dinero como el teléfono estaban a su disposición, señalándole que le daba tiempo para pensar.

El sábado 27 de mayo, Miguel Mendieta le informó a Luis Belotto que le llevaría una encomiendas a Miguel Ángel Insfrán, a modo de que el segundo hable con el Mayor Moral para que se le entregue a Tío Rico. A las 17:00 de ese día, Belotto fue hasta Viñas Cue con su esposa, para depositar la encomienda, pero se les informó que ya no era hora para eso y que el lunes podían hacerlo.

Hallan celular mediante control ordenado por jueza

El domingo 28 de mayo, la intención de hacerle llegar el teléfono a Tío Rico a través del Mayor Moral, seguía intacta. Eso se notó en una conversación por mensajes entre Luis Belotto y Miguel Mendieta.

Ese mismo día, a las 19:20, el coronel Luis Belotto se comunicó por llamada telefónica con el Mayor Guillermo Moral, informándole que iría su esposa para entregar unas encomiendas para Tío Rico, a lo que Moral le dijo que podía hacerlo ese lunes desde las 8:00. De ello fue informado Mendieta posterioremnte.

Ese lunes 29 de mayo, a las 5:29, el coronel Luis Belotto conversó con su esposa Alba Lidia Ale de Belotto, quien le consultó al militar si revisarían las encomiendas que va a dejar, a lo que él le responde que no creía. Belotto también le instruyó a su pareja que vaya junto a Moral, pero que no le ofrezca dinero a él.

A las 9:20 de ese día, Alba Lidia fue hasta Viñas Cue, identificándose como secretaria del abogado Miguel Ángel Mendieta. La mujer dejó una encomienda para Miguel Insfrán, consistente en un paquete de yerba mate y bolsas de té. A las 9:27, Belotto se comunicó con Mendieta para que este le diga a los guardias que entreguen los productos a Insfrán, pues el celular iba oculto dentro de dichos productos.

Sin embargo, con lo que no contaban Mendieta ni Belotto y mucho menos la esposa de este es que, la jueza penal de Garantías Rosarito Montanía había ordenado el control de toda encomienda recepcionada, por lo que se procedió a su revisión. Con el cateo se constató que se habían varias bolsas de té, remedios para mate y yerba, pero que en el interior de un paquete de yerba estaba escondido un celular iPhone con su cargador, que querían hacer llegar a Miguel Insfrán.

Mayor pidió que se “pinche” su celualr

Tras la entrega de las encomiendas, se produjeron varias conversaciones entre Alba Lidia de Belotto y su esposo, el coronel Luis Belotto, haciendo referencia a la entrega del dinero al Mayor Moral. También, reclamos de Miguel Ángel Mendieta a Belotto sobre que aún no le había llegado el celular a Tío Rico.

El 29 de mayo, el matrimonio Belotto conversó por llamada telefónica y manifestaron su preocupación por todo el operativo y la plata recibida. Luego a las 19:49, el coronel Belotto se comunicó con Miguel Mendieta, oportunidad en la que este último le señaló que Tío Rico aún no había recibido el celular. El mismo reclamo de Mendieta se registró el 30 de mayo.

Es por esa razón que, también ese 30 de mayo, a las 13:28, luego de el Mayor Moral haya denunciado el hallazgo del celular y, ya en el marco de la causa penal, se procedió a grabar, bajo autorización judicial, las comunicaciones entre el Mayor Guillermo Moral y el Coronel Luis Belotto.

En las llamadas, Belotto le interrogó de forma insistente a Moral, sobre el paquete de Yerba Mate, añadiéndole que era necesaria su entrega a Miguel Insfrán. En medio del diálogo entre ambos, Moral le consultó a Belotto si seguía disponible el dinero ofrecido, a lo que Belotto le señaló que “eso estaba a su disposición”.

Moral había consultado de vuelta, en la misma comunicación, de cuánto se trataba, a lo que Belotto le indicó manifestó que “el detenido -refiriéndose a Miguel Insfran- tiene varios ceros a la derecha en su cuenta y que se le proporcionaría lo que necesitaba, expresando posteriormente que podría hacerle en este momento la entrega de G. 10.000.000, quedando en que la entrega de dicho monto podría ser coordinada para el viernes”, por el 2 de junio de 2023.

Amistad entre abogado y militar

Según los datos recabados a través de las indagatorias a los tres imputados, el abogado Miguel Mendieta mantuvo comunicación con su amigo el coronel Luis Belotto desde el 25 de mayo, fecha desde la que Miguel Insfrán está privado de libertad en Viñas Cue.

Belotto primero averiguó sobre el régimen de encierro de Tío Rico y por último ya indagó en relación con la introducción de un celular al recinto castrense.

Los datos recogidos de los investigadores exponen que Mendieta primero intentó hacer llegar a su cliente Miguel Ángel Insfrán un celular. Para ello intentó sobornar a un militar de Viñas Cue, que no accedió a su pedido.

Tras la negativa que recibió, Mendieta recurrió a su amigo de años el coronel Luis Belotto, asignado al Comando del Ejército Paraguayo, ubicado entre las avenidas General Santos y Mariscal López. El abogado solicitó al militar su ayuda para introducir un celular a la prisión de Insfrán.

Es así que Belotto también realizó un ofrecimiento a otro personal militar, pero también tuvo una negativa. Ahí fue que su esposa logró meter el aparato en un paquete de yerba hasta la guardia donde fue detectado.

Dicho teléfono celular no era el que debía ser entregado, (conforme lo había ordenado la jueza Rosarito Montanía) por los militares de Viñas Cue a Tío Rico para que este procesado se comunique con sus familiares y abogado, según los investigadores.

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