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La jornada espiritual se realizó en el marco de un proyecto educativo de la institución religiosa de Carapeguá llamado “acompañamiento oportuno, juntos construimos un ambiente armónico “, que fue coordinado por el docente Óscar Lazaga y acompañado por los directivos y docentes de la institución.
La jornada espiritual se inició con el rezo del santo rosario. Posteriormente, se realizó la celebración de la misa, presidida por el sacerdote vicentino, Daniel Rosales. Además, los presentes participaron de la adoración al santísimo y culminó con la bendición a los padres y los hijos presentes.
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En la ocasión, el sacerdote recordó que “estamos en el mes de María y el Año de la Oración”, por lo que instó a orar, a conversar con Dios y hacer ese encuentro con Dios, desde el más fondo del corazón. Recomendó, tener presente que el Señor siempre escucha y dejen que él obre en las cosas que el hombre no puede solucionar.
Recordó que Dios nos ha creado para la felicidad, por eso nos ha regalado una familia, que es la primera escuela donde uno aprende a amar. En ese sentido, aconsejó a los niños y a los jóvenes a valorar a su familia, porque cuando uno sale de la casa ahí recién se valora a los padres, hermanos, abuelos, tíos y primos.
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Señaló que el regalo sagrado que Dios nos dio es la familia y muchas veces nos olvidamos de su existencia. “En algunos hogares los niños pasan muchos tiempos solos”, expresó el sacerdote. Agregó, no es porque los padres sean malos o se quieran desentenderse de la responsabilidad tan grande que tienen, sino porque les está tocando vivir una época en donde hay que corretear de un lado a otro, para poder llevar el pan y responder a las necesidades de la familia”.
Abogó para que en la familia reine el encuentro, que será tiempo de calidad y de calidez y que sean el instrumento que Dios nos ha dado a cada uno, para cumplir con los demás.