Desmoronamiento en calle de Limpio pone en riesgo a vecinos y transeúntes

LIMPIO. La entrada de la compañía Costa Azul, ubicada en las inmediaciones del Arroyo Damián, se ha convertido en una trampa para los vecinos y transeúntes que circulan por la zona. Un desmoronamiento de la calle, ocurrido durante el temporal del pasado 24 de abril, ha dejado un enorme socavón que representa un peligro latente para peatones, ciclistas y conductores.

El lugar representa un peligro para los transeúntes que no conocen la zona.
El lugar representa un peligro para los transeúntes que no conocen la zona.

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El desmoronamiento se encuentra en la entrada de la compañía de Costa Azul. La ausencia de señalizaciones y la falta de acciones por parte de las autoridades municipales han convertido la zona en un punto negro para la seguridad vial.

Vecinos de la zona han manifestado su temor ante la posibilidad de que en cualquier momento ocurra una tragedia. “Es cuestión de tiempo para que alguien resulte gravemente herido o incluso pierda la vida si no se toman medidas urgentes”, advierte José Ramírez, otro residente de la zona.

Pese a los reiterados reclamos de los vecinos, las autoridades municipales no han dado señales de actuar para reparar el daño y mitigar el riesgo en la zona. Las voces de protesta se han sumado en los últimos días, exigiendo una respuesta inmediata que garantice la seguridad de todos los ciudadanos que transitan por las inmediaciones del Arroyo Damián.

Mientras tanto, los vecinos han comenzado a implementar medidas de autoprotección, colocando señalizaciones precarias y alertando a los conductores sobre el peligro que representa el desmoronamiento. Sin embargo, reconocen que estas acciones son insuficientes y que se requiere una intervención urgente de las autoridades competentes.

Limpio-Central.
La ausencia de señalizaciones y la falta de acciones por parte de las autoridades municipales han convertido la zona en un auténtico punto negro para la seguridad vial.

Residentes de la zona de Limpio están preocupados

Andrea Villalba, una residente de la zona afectada, manifestó su preocupación ante la grave situación. “Hay motos que se quedan ahí estancadas porque no son gente que conoce la zona. Vienen y sufren ahí, atrapados en ese enorme hueco”, relato.

“No estamos pidiendo nada del otro mundo, solo que cumplan con su deber de mantener las vías públicas en condiciones seguras”, dijo otro lugareño, quien teme que la situación se agrave con las próximas lluvias.

La comunidad de Costa Azul espera que su grito de auxilio sea escuchado y que se tomen las acciones necesarias para evitar consecuencias graves. El desmoronamiento no solo representa un riesgo para la seguridad vial, sino también una amenaza para la integridad física de los vecinos que deben transitar a diario por la zona.

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