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En comunicación con ABC Cardinal este lunes, Nelson Cristaldo, experto en criptominería, explicó la razón detrás de la proliferación de emprendimientos dedicados a “minar” criptomonedas en Paraguay, lo que atribuyó principalmente a la alta disponibilidad de energía eléctrica en el país.
Explicó que el proceso de criptominería, que requiere la operación constante de un número importante de máquinas procesadoras de datos de alta capacidad, consume enormes cantidades de energía eléctrica, por lo que Paraguay, con sus vastas reservas de energía hidroeléctrica, se ha convertido en “un ‘hub’ muy importante” que atrajo a “empresas internacionales muy grandes”.
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Se estima que actualmente existen en Paraguay unas 50 empresas locales o internacionales haciendo criptominería de forma legal, además de un número de “granjas” ilegales que operan sin permiso de las autoridades y roban energía eléctrica.
Cristaldo señaló que las empresas que invierten en criptominería, especialmente las internacionales, realizan “inversiones muy grandes en infraestructura” de forma muy rápida y agresiva.
Puso como ejemplo que a la Administración Nacional de Electricidad (ANDE) puede llevarle entre uno y dos años construir una subestación que esas empresas suelen construir en menos de un año.
Tema “estratégico”
Opinó que la criptominería se convirtió en un “tema estratégico” para Paraguay debido a la cantidad de energía excedente que obtiene de las centrales hidroeléctricas de Itaipú y Yaycretá, energía que Paraguay no usa y acaba vendiendo a Argentina o Brasil a precios bajos.
Argumentó que atraer inversiones en criptominería es una opción “muy atractiva” para Paraguay, porque ese excedente de energía puede ser vendido a esas empresas a precios más altos en vez de ser cedida a los países vecinos.
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Señaló, sin embargo, que para que Paraguay se beneficie en la mayor medida posible del “boom” de la criptominería es necesario tomar medidas para combatir el robo de energía, que en el contexto de las granjas ilegales de criptomonedas alcanza una escala enorme.
Cristaldo opinó que el problema reside tanto en la complicidad por parte de funcionarios de la ANDE, que facilitan que las granjas ilegales roben energía, como en la corrupción en el Ministerio Público, que no da respuesta a las denuncias contra esos establecimientos ilícitos.
Comentó que está en preparación un proyecto de ley en la Cámara de Diputados que plantea castigar con hasta 10 años de prisión el hurto de energía, además de permitir a la ANDE apoderarse de los equipos y la infraestructura de las “granjas” allanadas tanto para seguir operándolas o para desmantelarlas y utilizar sus equipos como crea conveniente.
Criptomonedas en el sistema financiero paraguayo
Cristaldo dijo que las criptomonedas aún no han permeado el sistema financiero paraguayo como sí ha ocurrido en otros países de la región como Argentina y Brasil, pero afirmó que existe un “enorme mercado paralelo” del que participan especialmente los “mineros”, que todos los meses deben cambiar sus criptomonedas a dólares o guaraníes para pagar salarios o la energía eléctrica de la ANDE.
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Auguró que “en pocos años” se debería ver una mayor integración de las criptomonedas en las finanzas paraguayas, lo que -opinó- permitiría operaciones más rápidas y eficientes que las que posibilitan medios actuales como las billeteras electrónicas.