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En conversación con ABC Color este jueves, el ministro de Defensa Nacional, Óscar González, informó que el juzgado de instrucción militar que investiga la agresión a un cadete de la Academia Militar decretó prisión para el sospechoso de haber perpetrado el ataque, quien fue detenido anoche.
Un cadete de cuarto año de la Academia Militar fue detenido anoche por la supuesta agresión a otro aspirante a oficial, Édgar González, quien fue internado en el Hospital Militar Central de las Fuerzas Armadas el pasado lunes con agudos dolores abdominales que atribuyó a una agresión sufrida una semana antes.
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El juzgado de instrucción de la Justicia Militar que lleva adelante el caso convirtió esta mañana en prisión la detención. El sospechoso está recluido en la cárcel militar de Viñas Cue.
El ministro González dijo que la medida constituye una “señal clara de que este tipo de hechos no van a ser tolerados y van a ser reprimidos con todo el peso de la ley”.
Supuesto abuso de autoridad, desobediencia y lesión grave
Por su parte, el fiscal general de la Justicia Militar, coronel Ernesto Cabrera, comentó que la víctima, el cadete González -quien continúa hospitalizado–, aún no quiso declarar y relató que fueron declaraciones de otros cadetes las que permitieron identificar al supuesto agresor.
También se negó a declarar el detenido, quien fue convocado hoy. El coronel Cabrera indicó que se fijará otra fecha para que este acuda a declarar con un abogado de su confianza, ya que en la convocatoria de hoy fue asistido por un defensor público de la Justicia Militar.
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El supuesto agresor está procesado por los presuntos delitos de abuso de autoridad (que podría resultar en hasta dos años de prisión), desobediencia y lesión grave (hasta cuatro años de cárcel).
En caso de que sea condenado, el detenido recibirá una baja deshonrosa de las Fuerzas Armadas, agregó el fiscal militar.
Según fuentes médicas, el cadete agredido sufrió una ruptura del bazo, que requirió una operación quirúrgica de la que se está recuperando favorablemente y que no dejará secuelas que impidan que el aspirante a oficial militar continúe con su carrera castrense.