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Documentos públicos a los cuales accedimos dan cuenta de que desde 2016 la Gobernación de Itapúa comenzó a recibir anualmente sumas de dinero transferidos por la Entidad Binacional Yacyretá (EBY), para financiar un programa de asistencia a familias campesinas conocido como Ñemity. En total la institución departamental recibió entre 2016 y 2023 más de G. 38.054 millones para la puesta en vigencia de ese plan.
Lo contradictorio es que esa importante cantidad de dinero nunca ingresó en el presupuesto general de la institución departamental, donde estarían bajo el control de la Junta Departamental de Itapúa (JDI). Los recursos eran depositados en la cuenta de un Consejo de Emergencia Departamental de Itapúa (CEDI), según establecían los convenios entre la EBY y la Gobernación de Itapúa.
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Previa solicitud
El convenio complementario Nº 25, del 7 de noviembre de 2016, firmado por el gobernador colorado cartista Luis Gneiting (ya fallecido) y el entonces director paraguayo de la EBY, Ing. Ángel María Recalde, establecía que los desembolsos del dinero en el marco del programa Ñemity se harán “previa solicitud por escrito presentada por la Gobernación, a favor del Consejo de Emergencia Departamental de Itapúa (CEDI)”, y condiciona que se deberá depositar en una cuenta corriente habilitada para el efecto en un banco de plaza, “con la obligación de rendir cuentas a YACYRETA de todo lo actuado”.
Los siguientes convenios, formalizados por los gobernadores Federico Vergara (2018) y Juan Schmalko (2018-2021), ambos colorados cartistas, con el director de la EBY, Nicanor Duarte Frutos, también contenían las mismas condiciones.
Evadir controles
La transferencia y manejo al CEDI se habría hecho con el fin de evadir los controles de la Junta Departamental de Itapúa y de instituciones como la Dirección Nacional de Contrataciones Públicas (DNCP). Esto se evidencia a partir de informes elaborados por funcionarios de la EBY en los cuales se detallan groseros incumplimientos por parte de la gobernación en la ejecución del programa Ñemity 4.0.
El 7 de mayo de 2020, por ejemplo, el funcionario de la EBY, Lucio Cañete Torres, elaboró el memorándum Nº 26/2020 dirigido a la coordinación social de la EBY, en ese momento a cargo de Fidel Servián. El documento señala entre otras cosas que de un monto superior a G. 1.000 millones para un plan piloto con pequeños productores, solamente fueron ejecutados 176 millones (18%) y del cual “no se encontraron las aclaraciones pertinentes”.
Otro punto que se hace referencia en el “memo” es el presupuesto asignado para mantenimiento de tractores que de G. 480 millones se elevó a G. 753.500.000.
El informe señala también un grosero sobrecosto en la contratación de una empresa para el rastreo satelital de 40 tractores. De un presupuesto de G. 150 millones saltó a G. 580.776.025, sin las “justificaciones pertinentes”, según el documento.
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¿Qué es el CEDI?
Los registros detallan que el 30 de octubre de 2014, el entonces gobernador de Itapúa, Luis Gneiting (ya fallecido), y la secretaria general de la gobernación, Erika Kufeld de Cañete, procedieron a realizar el acto de transcripción del reglamento interno del Consejo de Emergencia Departamental de Itapúa (CEDI) ante la escribana pública Rita Concepción Ruiz Díaz. Ambos ocupaban el cargo de presidente y secretaria ejecutiva, respectivamente. Desde entonces el CEDI pasó a ser una suerte de órgano “extra poder”, presidido por el gobernador de turno.
Concejal Flecha pidió informe
El concejal departamental de Itapúa Oscar Flecha (independiente) requirió un informe sobre el empleo de dinero por parte del Consejo de Emergencia de Itapúa (CEDI). Esto es debido a los multimillonarios fondos provenientes de la Entidad Binacional Yacyretá (EBY) y de la Gobernación y a que no existe informe detallado sobre el destino de ese dinero, como en qué se gastó y cómo se usó, señaló el edil departamental.
“Fundado en la ley de transparencia presenté un pedido de informe al Ejecutivo departamental, el cual, por cierto, hasta ahora no me fue proporcionado, pese a que pasó largamente el plazo de contestación, expresó Flecha, quien cuestionó la forma simplista e irresponsable en que se vienen aprobando las ejecuciones presupuestarias en la gobernación local.
El concejal dijo que llama la atención la cantidad de dinero que fue transferida por la Gobernación al CEDI, y la falta de rendición de cuentas del uso de ese caudal. “No solamente necesitamos saber cómo se usaron esos recursos que vinieron para los programas de asistencia a los campesinos a través de Ñemity, sino que queremos saber el destino de grandes sumas de dinero transferidos desde la gobernación hasta el citado Consejo de Emergencia durante la pandemia del covid-19″, añadió Flecha.