Cargando...
Los pobladores de esta ciudad y de las compañías Palmito y Potrero Ybate, ubicadas en el área del cerro 3 Kandu, el atractivo turístico por excelencia, teniendo en cuenta que es el pico más elevado de nuestro país, se encuentran en “pie de guerra” a raíz de la insistencia de un productor agrícola de origen brasilero en cultivar soja en dicha área. El cultivo de soja, además de ocupar extensa área, utiliza productos químicos que podría perjudicar la naturaleza de la región, según los vecinos
Los lugareños, quienes pretender preservar la zona libre de agroquímicos, entregaron una nota al intendente municipal local Walter Troche (ANR), para exigir el cumplimiento de la ordenanza municipal 11/2023 “que prohíbe en todo el distrito de Eugenio A. Garay la explotación agrícola mecanizada que demande el uso intensivo de agroquímicos”.
Según los antecedentes, dicha ordenanza fue promulgada precisamente a raíz de la presencia de una explotación agrícola mecanizada, frente del tanque de agua municipal a orillas de la ciudad de Gral. Eugenio A. Garay.
Lea más: Temen que cultivo de soja contamine agua potable de Gral. Eugenio A. Garay
En aquella ocasión, fiscalizadores del Mades y de la unidad ambiental del Ministerio Público de la jurisdicción del Guairá, a cargo de Erico Ávalos, visitaron al productor, José Carlos Casagrande, a quien se le advirtió de la prohibición de cultivo de soja en la zona de 3 Kandu.
El poblador Francisco Fernández explicó que los lugareños, tanto de la zona urbana como de las compañías Palmito y Potrero Ybate, están en “pie de guerra, porque este productor Casagrande, de manera prepotente y burlándose abiertamente de las instituciones y de las normativas paraguayas, comenzó a alquilar tierras y a cultivar soja en la zona de la reserva del Ybytyruzú, específicamente en el área de influencia de 3 Kandu”.
Fernández explicó que los cultivos de soja se encuentran a escasos metros de una escuela y de un arroyo cristalino del lugar.
La presidenta de la Junta Municipal de esta localidad, Lourdes Luna, explicó que convocó al agricultor José Carlos Casagrande para explicarle el alcance de la ordenanza que prohíbe cultivos extensivos, con el uso de agroquímicos. También participaron los pobladores y el jefe comunal Walter Troche.
Francisco Fernández, representante de los vecinos, explicó que reclamaron a Casagrande el hecho de que el mismo ya es reincidente, que debe respetar a la comunidad y desistir de su intento de envenenar con agroquímicos a las comunidades, además de arruinar uno de los lugares más bellos del país.
Se le recordó que ya se le había notificado una vez y que el mismo estaba en perfecto conocimiento de la prohibición de cultivar soja en la zona.
Según los datos, tras la reunión, las autoridades y el productor firmaron un acta de compromiso de cese de toda actividad agrícola en la zona del cerro 3 Kandu, pero los lugareños indicaron que permanecerán “vigilantes y no permitiremos la destrucción de 3 Kandu, porque es sagrado y lo defenderemos hasta con nuestras vidas”.