Inicio de clases: más de 330.000 sillas, 270.000 mesas y 17.850 computadoras urgen en escuelas públicas

Miles de niños iniciarán las clases sentados en pupitres oxidados y llenos de astillas, mientras los congresistas sesionarán en sillones “de oro” que compraron a casi G. 6.000.000 cada uno. Directores apuntaron contra el malgasto público, cuando desde hace 10 años llenan planillas con pedido de mobiliario para aulas. Según microplanificación, para este año urgen en las escuelas más de 330.000 sillas, 270.000 mesas pedagógicas y 17.850 computadoras.

Sillas y mesas pedagógicas en mal estado aguardan a los niños de la escuela Delfín Chamorri del barrio Roberto L. Pettit de Asunción.
Sillas y mesas pedagógicas en mal estado aguardan a los niños de la escuela Delfín Chamorri del barrio Roberto L. Pettit de Asunción.virgilio vera

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En la escuela Roberto L. Pettit del barrio Villa Aurelia de Asunción, faltan sillas, los pupitres existentes están deteriorados y no tienen aire acondicionado; “con ventiladores que apenas funcionan nos mantenemos”, lamentó María Cecilia Salinas de Soto, encargada de despacho de la institución educativa.

La necesidad de muebles y artefactos como equipos de aire acondicionado o ventiladores es acuciante en las instituciones educativas, según los datos que proveen los directores al Ministerio de Educación y Ciencias (MEC), a través de la microplanificación.

Para este año lectivo 2024, que se inicia el 23 de febrero, el año pasado directores de 7.500 establecimientos escolares solicitaron a través de la microplanificación, 333.311 sillas pedagógicas, 270.991 mesas pedagógicas y 17.850 computadoras para las tareas administrativas o para salas de informática. Además se pidieron 9.426 equipos de aire acondicionado y más de 8.000 ventiladores.

Sin sillas y con un escritorio destruido está esta sala de clases en el Colegio Nacional Roberto L. Pettit de Asunción.
Sin sillas y con un escritorio destruido está esta sala de clases en el Colegio Nacional Roberto L. Pettit de Asunción.

Mientras, los congresistas están lejos de esta realidad y ya pueden sesionar en sus 221 cómodas sillas “de oro”, que costaron al Estado G. 5.700.000 cada una. Los directores no escondieron su indignación ante este suceso.

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Inicio de clases: directores apuntan contra congresistas por “sillas de oro”

Con qué cara yo, senador, diputado, voy a mirarle a la cara al papá que me votó, si compro una silla por G. 6.000.000 (sic), sabiendo que su hijo no tiene una silla en la escuela”, apuntó Miguel Marecos, titular del Sindicato Nacional de Directores (Sinadi).

Los pupitres y mesas en mal estado son la imagen del Colegio Nacional República Argentina.
Los pupitres y mesas en mal estado son la imagen del Colegio Nacional República Argentina.

El gremialista comentó que los directores, desde hace diez años realizan la microplanificación, que son datos de las necesidades de la escuela que van al MEC y a la intendencia local, que tiene los recursos del Fondo Nacional de Inversión Pública y Desarrollo (Fonacide).

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“Siempre me dicen los directores, ro presenta jeyma (microplanificación), pero nunca nos van a hacer caso, a lo que yo respondo que son las vías para hacer los pedidos”, agregó.

Una silla de oro del Congreso equivale a 32 pupitres

Datos del Observatorio Educativo Ciudadano indican que por cada silla de oro, se pueden adquirir 32 pupitres para las escuelas a G. 170.000 cada uno, según cifras de la Dirección Nacional de Contrataciones Públicas (DNCP).

Según el MEC, 2.000 instituciones educativas están en mal estado. Tienen todavía letrinas, 516 establecimientos escolares.

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