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Con la presencia de importantes grupos musicales nacionales e internacionales se realizó la trigésima quinta edición de la tradicional fiesta Hawaiana a orillas del río Paraguay en la ciudad de Pilar. Del evento participaron personas de distintas partes del país.
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La fiesta Hawaiana se inició en 1988, impulsada por la docente Gilda (Kitu) Quintana (+) para recaudar fondos y ayudar a los alumnos becados por la American Field Service (AFS) quienes viajaban a diferentes países para un intercambio cultural.
La fiesta es considerada como una puerta abierta al turismo que trae beneficios económicos muy importantes para la ciudad de Pilar y el departamento de Ñeembucú. De acuerdo a los datos recogidos del sector hotelero, una semana antes cientos de personas llegaron a la ciudad de Pilar y comenzaron a realizar el circuito turístico, visitando los sitios históricos y como un momento de relax practican la pesca deportiva.
Según Miguel Ángel Flecha, gerente del Hotel las Hortensias, todos los hoteles, hostales y hospedajes se llenaron y muchas personas alquilaron casas por una semana o dos días para reposar en la ciudad y disfrutar de la fiesta. Reconoció que aún falta ampliar la infraestructura en hoteles y restaurantes pero que de a poco se irán sumando y ampliando los servicios.
Estuvieron presentes el presidente de la República, Santiago Peña, y su esposa Leticia Ocampos; el vicepresidente de la República, Pedro Alliana, también con su esposa la diputada Fabiana Souto. Los representantes del Ejecutivo estuvieron acompañados por el gobernador de Ñeembucú, Víctor Hugo Fornerón; el director de la Entidad Binacional Yacyretá (EBY), Luis Benítez; y el director de Itaipú Binacional, Justo Zacarías Irún.
Seguridad
La Policía Nacional brindó la seguridad necesaria a los visitantes. Varias personas fueron detenidas en un retén establecido sobre la ruta PY19 Colonia Mburicá, de acuerdo a los datos recogidos.
El despliegue policial contó con los uniformados tácticos, antimotines, Grupo Lince, servicio de Inteligencia e Investigaciones, aunque igual hubo denuncia de robos de celulares pero dentro del local de la fiesta por parte descuidistas que llegaron de la zona central.
A la seguridad se sumaron también los militares de la Armada Paraguaya de la prefectura Naval, zona Pilar, quienes custodiaban todo el tiempo el perímetro del río Paraguay con 7 embarcaciones con patrullas permanentes.
Quejas
Aproximadamente unas 1.000 personas, todas de la ciudad de Pilar, quedaron fuera del local de la fiesta mirando desde la costanera. Se quejaron de los organizadores por considerar que las entradas eran muy caras y por no permitir la presencia de los ciudadanos sobre la defensa costera. En algún momento los antimotines utilizaron la fuerza para desalojar a los que miraban desde afuera, pero estos se resistieron y se pudo calmar los ánimos.
Un compatriota que llegó de la Argentina, César Parra, se mostró indignado al igual que otro ciudadano de nombre Ariel Leiva y culparon al vicepresidente Pedro Alliana por haber permitido a los antimotines usar la fuerza para desalojarlos del lugar. Otro grupo de ciudadanos gritaba en coro en el fondo “Mangui corrupto” (en alusión al vicepresidente).
Los ciudadanos pilarenses aguardan que el próximo año de la fiesta Hawaiana se encargue la municipalidad local, para que se reduzca el costo de las entradas y tener una mejor organización, dijeron.