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La semana pasada, estalló un caso de presunto abuso sexual y físico dentro del Hospital Psiquiátrico del Paraguay. A la primera denuncia, le siguió una ola de reportes de usuarios, familiares de pacientes y hasta extrabajadores, quienes denunciaron que los internados viven en condiciones inhumanas.
Esta mañana, el director del hospital, doctor Aldo Castiglioni, apareció para hablar del tema y defendió fervientemente a su personal. Admitió que se encuentran en una situación crítica de falta de insumos y por el mal estado de su infraestructura, pero minimizó las denuncias de supuestos abusos por parte de enfermeros y guardias.
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Cerca del mediodía, un equipo de ABC Color recorrió los pabellones del Hospital Psiquiátrico. En los pasillos se observa a pacientes sumamente desnutridos y varios de ellos incluso desnudos, debido a que se sacan sus prendas con frecuencia.
El psiquiátrico no tiene presupuesto para limpieza
Hay varios tipos de pacientes, desde los de larga estadía hasta los agudos y crónicos. Algunos se encuentran en el lugar desde el año ‘81, puesto que no tienen a dónde ir.
Los crónicos son los que se encuentran tras las rejas, en espacios cerrados y rodeados de condiciones insalubres, debido a la falta de presupuesto para limpieza. En medio de la intensa ola de calor se refugian en los pocos recovecos con sombra y escasa ventilación.
Para calmar el calor del verano, muchos se pasan el día tomando tereré, por lo cual constantemente se piden donaciones de yerba mate.
Habitaciones repletas de humedad
Las “habitaciones” de los pacientes están llenas de humedad. La limpieza, en algunas ocasiones, resulta sobrepasada por pacientes que hacen sus necesidades fisiológicas directamente en el piso de los cuartos.
Algunas de las camas están hechas con una dura base cemento y una fina colchoneta. Solo algunas habitaciones cuentan con alguna que otra pequeña ventana para mejorar la circulación del aire.
Por otro lado, hay espacios compartidos donde se encuentran internados pacientes con diversas dolencias. Uno de los pacientes se encuentra amarrado a la cama, debido al riesgo para su salud y la de los enfermeros.
Por los pasillos, los pacientes que se encuentran en libertad se sientan en los suelos. Los baños compartidos ni siquiera tienen puertas y están con los inodoros sin asientos ni mochila (por seguridad).
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Pacientes en situación de abandono
Muchos de los ventiladores están descompuestos. Además, posee un techo que se cae a pedazos, al igual que las paredes.
El mismo director confirmó que el “Neuro” realiza 40.000 consultas al año y “cuenta con un déficit de insumos, recursos humanos y la infraestructura es sumamente precaria”.
Otro de los déficits reportados es la escasez de personal de psiquiatría y trabajadores para dar abasto a la limpieza de todos los pabellones, reportó la periodista de ABC Color, Nadia Cano. En total, actualmente hay 132 pacientes de larga estadía, en situación de abandono social.