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La retención de un convoy de embarcaciones pertenecientes a una empresa brasileña, Hidrovías do Brasil, que tenía bandera paraguaya porque es de una filial de la empresa en Paraguay, por parte de funcionarios del gobierno argentino en Buenos Aires, fue calificada por el Gobierno Federal brasileño como contraria a la libertad de navegación y como algo no aconsejable por parte de los argentinos, señala la información difundida por el sitio Valor.Globo.com, en base a un comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores de dicho país.
Explica que la discusión por el gravamen US$ 1,47 por tonelada, que fue creado a principios de año y confirmado a fines de julio por parte de Argentina, por la navegación por el río Paraná entre Confluencia y Santa Fe, produjo un episodio sin precedentes, que primero fue a nivel técnico, pero ahora ha entrado en la esfera de la política.
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Agrega que Argentina es el mayor socio comercial de Brasil en América del Sur y los presidentes Luiz Inácio Lula da Silva y Alberto Fernández son aliados políticos e ideológicos.
“El gobierno brasileño, al igual que los otros estados parte del Acuerdo Hidrovía Paraguay-Paraná, Bolivia, Uruguay y Paraguay, afectados por el nuevo peaje cobrado por Argentina, cuestiona la legalidad del cobro a la luz de ese instrumento internacional”, según señala comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores en un comunicado, expresa la noticia de Valor Globo.
Trasgrede el Acuerdo de la Hidrovía
La noticia destaca que según la posición de Brasil, Bolivia, Paraguay y Uruguay, que conforman el Acuerdo de la Hidrovía, el gobierno argentino no ha podido demostrar hasta ahora de manera efectiva la contraprestación del peaje en servicios en la vía navegable.
Alega que dicha condición es una exigencia prevista en el Acuerdo de Santa Cruz para cualquier cobro en la hidrovía, teniendo en cuenta que la navegación simple no puede ser gravada legalmente, según el manifiesto oficial del Brasil, señala la información generada por Marcos de Moura e Souza, desde San Pablo, Brasil, para Valor.
Agrega que Brasil utiliza el corredor fluvial como una opción para transportar granos y minerales a los puertos de Argentina y Uruguay.