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Durante la temporada de mucho frío, es bueno utilizar la calefacción para mantener los ambientes confortables.
Pero, ya sea que se elijan estufas o acondicionadores de aire, estos deben ser utilizados con moderación.
Bajo ningún caso es recomendable utilizar el brasero dentro de las habitaciones, pues esta práctica puede poner en riesgo incluso la vida de las personas. Ya han ocurrido muchos casos de personas que fallecieron por olvidarse del brasero en el interior de las casas, e inhalar monóxido de carbono.
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Ojo con la intoxicación
Recordemos que la quema del carbón o leña en ambientes cerrados causa intoxicación por monóxido de carbono.
Tampoco es recomendable usar calefactores que generan viento, pues estos secan las vías aéreas superiores.
Es muy importante cuidar que las fuentes de calor, como estufas y braseros, no estén al alcance de los niños, pues estos son fácilmente víctimas de quemaduras.
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Mantenga temperaturas recomendadas
La temperatura ideal en la que deben estar los calefactores es de entre 25º y 26º. Se deben evitar temperaturas superiores a estas, pues a los alérgicos y asmáticos les ocasionan cuadros obstructivos bronquiales cuando la calefacción está muy elevada.
Así también, cuando usa calefacción, se recomienda usar humidificadores.