Cargando...
Óscar Stark, viceministro de Transporte, dialogó este martes con ABC Cardinal sobre la situación del transporte público, tema recientemente puesto en relieve tras agotarse el presupuesto para subsidio a los empresarios.
Lea más: Presupuesto para subsidio se agotó: ¿de dónde sacarán más dinero para dar a transportistas?
El subsecretario de Estado señaló que, además de las reprogramaciones para asegurar los fondos para los transportistas, se articulan medidas para mejorar la fiscalización de las frecuencias de buses.
En tal sentido, mencionó que hay empresas del transporte que ni siquiera cuentan con la cantidad requerida de ómnibus para cumplir con las frecuencias. “Tenemos que modificar algunas resoluciones que permitan al Centro de Monitoreo controlar a las empresas; tenemos que cambiar nuestro mecanismo de control de frecuencia hacia nuestro Centro de Monitoreo”, refirió.
Igualmente, al referirse a los controles, comentó que el Viceministerio tenía apenas 10 fiscalizadores; sin embargo, debió echar a cinco de ellos por denuncias de corrupción. “Hay problemas con los fiscalizadores porque trabajan en la calle y a partir de ahí se generan denuncias sobre su comportamiento”, apuntó.
Stark inicialmente no brindó detalles sobre las denuncias y se limitó a señalar que se trataba de “denuncias sobre el comportamiento. Pero eso se normal en todas las instituciones; yo también por eso hice nueve cambios, además de los fiscalizadores...”, indicó.
Finalmente, ante las consultas, confirmó que se trata de empleados que “solicitaban un pago determinado a las empresas para no fiscalizar”.
Fiscalizadores no fueron denunciados ante la Fiscalía
Óscar Stark aclaró que ninguno de los cinco fiscalizadores apartados fue denunciado ante la Fiscalía. “No tenemos pruebas pero sí mensajes; nadie quiere denunciar, pero fuimos verificando”, refirió.
Reafirmó que a partir de ahora se busca que los controles se realicen mayormente a través del Centro de Monitoreo y, a la par, se contratará a nuevos fiscalizadores, que deberán ser capacitados nuevamente.
Aclaró que “cuando el Centro de Monitoreo esté completo, todo lo que tenga que ver con las frecuencias y hasta el comportamiento de choferes se puede controlar ya (sin fiscalizadores)”.
Señaló que los funcionarios en calle revisarán detalles adicionales, como que los buses se movilicen con las puertas cerradas.