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La fiesta popular de celebración fue organizada por la parroquia local y una comisión de apoyo, con el acompañamiento de la Municipalidad, que también instaló un stand de comidas típicas y juegos durante la feria. Todo lo recaudado será destinado a las obras de ampliación de la iglesia, en plena ejecución.
“Para este año queremos terminar las obras en el sector del altar, y para el año próximo extender la ampliación hacia los laterales”, refirió el cura párroco, Pbro. Edelio Aguinagalde. La celebración religiosa pone su acento en la importancia del laico y su compromiso con la sociedad a través de su participación en la política, en la educación, en la cultura. “Se espera del laico ese compromiso como tal en la construcción de una sociedad mejor”, refirió el religioso.
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A las ocho de la mañana de ayer se inició la tradicional peregrinación religiosa con la imagen del santo patrono, que recorrió las 19 capillas que dependen de la parroquia San Juan Bautista. Cuatro de ellas se encuentran en el distrito de San Juan del Paraná, y 15 capillas en la compañía Santo Domingo, que geográficamente se encuentra en una zona rural del vecino distrito de Encarnación. A las 18:30 se cumplió la solemne misa concelebrada en honor al santo patrono de la ciudad, presidida por el obispo de Encarnación.
San Juan, una comunidad que pugna por su desarrollo
El distrito de San Juan del Paraná es una ciudad relativamente joven, con una población de alrededor a los 12.000 habitantes. Su nacimiento como distrito fue en 1988. Fue creado por ley 1355 del 19 de diciembre de dicho año, que dispuso el desprendimiento de esta fracción del distrito de Encarnación. Su centro urbano se encuentra a 15 kilómetros de la capital itapuense de la cual dependía anteriormente.
En la época de la Colonia, este sitio era una remonta, una zona para la cría de ganado de los jesuitas, que tenían sus misiones en los alrededores, como el caso de Ytapúa, Jesús de Tavarangüe, Santísima Trinidad, y Santos Cosme y Damián. Durante la dictadura de Gaspar Rodríguez de Francia se conservó el sitio como una “estancia de la Patria”, y posteriormente, durante la reorganización administrativa del presidente Carlos Antonio López y la creación de la Villa Encarnación, en 1843, este paraje quedó dentro de su esfera.
La compañía era conocida como “San Juan-i”, hasta su elevación a la categoría de Municipio, en 1988. Desde entonces, la comunidad viene experimentando un fuerte y creciente desarrollo urbanístico.
Salud y fuentes de trabajo, dos carencias históricas
Para la administración municipal del intendente Aldo Lepretti (PLRA, periodo 2021-2025), uno de los problemas antiguos de la comunidad que se propone atacar es la falta de una adecuada cobertura en salud pública.
Para el administrador comunal es prioritario ampliar la cobertura de salud y convertir este puesto de unidad sanitaria familiar en un centro de salud que atienda las 24 horas, todos los días de la semana.
“Tenemos atención sanitaria de lunes a viernes de 07:00 a 19:00 horas horas, queremos llevar la atención a las 24 horas, todos los días, la necesidad justifica plenamente. Este centro sanitario registra más de 2.000 consultas al mes”, sostuvo.
Actualmente el puesto sanitario dispone de unos 16 funcionarios, 11 de ellos contratados por el Ministerio de Salud Pública, y cinco por el Consejo Local de Salud, que depende de la Municipalidad. Para lograr el objetivo necesitan como mínimo unos 25 funcionarios de salud, entre médicos y enfermeros, que garanticen el funcionamiento permanente. Actualmente cuando se dan las necesidades los pacientes son derivados en ambulancia hasta el hospital regional de Encarnación, “pero ese hospital está totalmente colapsado”, dijo, y además, implica un importante gasto en combustibles en empleo de la ambulancia.
Lepretti sostuvo que están en tratativas con el ministerio de salud para conseguir rubros y contratar más médicos.
Fuentes de trabajo
Otra situación que preocupa a la administración es la falta de fuentes de ocupación para la población, que tiene alrededor del 40 por ciento de jóvenes. La mayoría de los pobladores de San Juan trabaja en Encarnación, muchas lo hacen en el servicio doméstico, el comercio, y en paso fronterizo. En la ciudad existen pequeñas granjas y cultivos agrícolas.
Las principales fuentes de ocupación a nivel local son las canteras de piedra, el puerto de cargas de la compañía agroindustrial Trociuk, y el barrio cerrado Agua Vista. La construcción es otro de los rubros que da mano de obra, por lo que desde la Comuna se está trabajando en un proyecto de creación de talleres de formación de mandos medios, especializados en áreas como carpintería, electricidad, plomería, albañilería. “Estamos elaborando un proyecto que vamos a presentar al Ministerio de Educación cuando asuma el nuevo gobierno. No hace falta mucha inversión en infraestructura, porque ampliaremos los colegios ya existentes, solamente serán necesarios construir los talleres”, puntualizó.
Asimismo, el intendente municipal refirió que otro proyecto a corto plazo que se propone ejecutar es la iluminación de la avenida que conecta el centro habitacional Agua Vista con la playa, un centro de atractivo turístico con que cuenta la ciudad, sobre el río Paraná. Para el efecto recurrirá también al nuevo gobierno nacional próximo a asumir sus funciones.
El intendente sostuvo que la ciudad tiene varios reclamos que hacer a la Entidad Binacional Yacyretá (EBY) en compensación por territorio inundado, los cuales hasta ahora están pendientes, como el asfaltado de un camino vecinal que cruza toda el área urbana del distrito, desde el puerto de cargas de la ANNP, sobre la ruta nacional PY01, hasta la ruta de acceso al puerto de cargas de la empresa privada Trociuk.
Asimismo, recordó el administrador comunal que hay varios convenios con el ente, los cuales dejaron de ser ejecutados desde que asumió la intendencia una administración de un signo político contrario al gobierno nacional. “Vamos a reclamar ante el nuevo gobierno el cumplimiento de convenios que no fueron renovados por la EBY”, sostuvo.
Entre estos convenios citó el mantenimiento del parque ecológico, el pago de un bus universitario para jóvenes que estudian en universidades de Encarnación, y que actualmente su costo es cubierto por el municipio.
San Juan del Paraná sufrió la pérdida de 2.000 hectáreas de su territorio, inundadas por el embalse de Yacyretá, se perdieron importantes fuentes de arcilla que daba vida a una industria cerámica y ocupación de mano de obra. “Tenemos muchos reclamos pendientes de atención por parte de la EBY”, acotó el intendente municipal.