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El fiscal Silvio Alegre investiga la denuncia hecha en mayo de este año por la madre de la víctima, una estudiante de 17 años, matriculada en un reconocido colegio público de Luque. Según el relato, el presunto abuso sexual fue sistemático desde hace un año y fueron sindicados como supuestos autores dos profesores y un personal administrativo, de 50, 55 y 59 años respectivamente, de la misma institución a la que asiste la joven. Los cargos investigados son abuso sexual, pornografía infantil y acoso sexual.
En la denuncia se relata que desde mayo de 2022, uno de los profesores de la víctima, le envió mensajes vía WhatsApp a la estudiante en los que le pedía fotos de su cuerpo desnudo, además de pedirle tener relaciones sexuales con él a cambio de beneficiarla con buenas calificaciones y exoneración de trabajos prácticos tanto para ella como para su grupo de compañeros.
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En otro momento, este mismo profesor, manoseó a la estudiante dentro de su vehículo en el propio estacionamiento del colegio en seis oportunidades. La madre de la menor dijo que, aparentemente, “esto se comentaba entre profesores hombres”, por lo que, a finales de mayo de 2022, aparece otro profesor que además de manipularla, le habría ofrecido dinero a la alumna a cambio de relaciones sexuales.
Este segundo docente, incluso le compraba “cosas de la cantina” y la acosaba sexualmente de forma constante, denuncian. También, habría manoseado a la joven dentro de su vehículo en el estacionamiento del colegio en tres oportunidades.
La denunciante alegó que en febrero de 2023, el segundo sospechoso del presunto abuso, llevó a su hija hasta un motel de Luque “donde con manipulaciones tuvo coito y fue su primera vez, repitiéndose el episodio en marzo de 2023″. El agresor habría dicho a la estudiante “que la amaba y la quería” y también le solicitó fotos de su cuerpo desnudo.
Luego, aparece un tercer sospechoso, también docente, según la denuncia, quien habría obligado a la joven a subir a su vehículo, aparcado en el estacionamiento del colegio “a cambio de su silencio”. Este también pidió fotos desnudas.
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La madre denunció ante el Ministerio Público, que tanto los compañeros como directivos de la institución educativa “tenían conocimiento” de lo sucedido, pero que “lo manejaban como chisme” y no activaron el protocolo. “Solo lo dejaron asentado en un acta para salvarse de cualquier denuncia posiblemente”, expresó.
Sumariados y apartados del cargo
El fiscal Silvio Alegre dijo que se trata de un caso muy delicado y que se encuentra investigando todo lo denunciado por la madre de la supuesta víctima. Agregó que la joven relató el presunto hecho tres veces, una vez a la Policía, luego ante la Fiscalía y también a la psicóloga forense del Ministerio Público, y que las descripciones de los episodios tienen consistencia.
El agente señaló también que aún quedan otras sesiones con la psicóloga y que luego se hará una evaluación final. La víctima entregó el celular al fiscal, en el que supuestamente se mantenían las conversaciones con los sospechosos y el aparato ya fue entregado para la pericia correspondiente.
Asimismo, el investigador afirmó que los directivos del colegio ya se presentaron a la Fiscalía donde sostuvieron que no tenían conocimiento del hecho, hasta el momento que se presentó la denuncia formal.
El caso fue comunicado al Ministerio de Educación y Ciencias (MEC), que ya ordenó sumario para los tres profesores, uno de ellos personal administrativo. También, por protocolo ya fueron apartados de sus cargos.