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El emblemático chipero Juan Ramón Ayala falleció este sábado a los 82 años de edad, en su domicilio en la ciudad de Eusebio Ayala. Venía arrastrando varias complicaciones de salud por una enfermedad de la sangre y esta madrugada sufrió un repentino infarto, según sus allegados.
En su última entrevista con ABC Color en 2022, Ayala relató que comenzó su vida empresarial vendiendo agua helada y comenzó a vender chipa de una vecina cuando se mudó con su familia a la localidad de Barrero Grande, haciendo hasta cinco recorridos diarios con 50 chipas.
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Eventualmente construyó su propio horno y empezó a producir chipa en su casa para venderla en paradas de buses.
Llegaba a Asunción en bus desde Barrero con dos canastas para vender. Con las ganancias logró construir su propia casa, un horno y un tinglado.
A partir de allí comenzó un “imperio chipero”, que incluía puestos fijos y camionetas de reparto que llegaban a distintas ciudades del país todos los días, con su deliciosa carga, calentita y aromática.
Chipa Barrero de Juan Ramón Ayala, un legado
Hasta sus últimos días, Ayala continuó en su oficio y seguía trabajando en su chipería, que a su vez dio trabajo a emprendedores de Eusebio Ayala, Ypacaraí y Asunción.
La comunidad de Barrero, Eusebio Ayala, llora la partida de una figura emblemática que deja un importante legado en Cordillera.
