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Conductores hacen constantes denuncias de una presunta mala gestión del tránsito fronterizo con fines lucrativos por parte de las instituciones encargadas de realizar los controles de las filas.
Circulan videos por redes sociales de la queja de los automovilistas, que refieren que sobre el puente y en las casillas argentinas no hay fila de vehículos, mientras miles de automóviles esperan en el lado paraguayo que les habiliten el paso para poder cruzar la frontera.
Se volvió habitual realizar filas de hasta al menos 2 kilómetros y esperar hasta 8 horas para poder cruzar a través del Puente Internacional San Roque González de Santa Cruz, desde la ciudad de Encarnación hasta la vecina Posadas, en la república Argentina.
A esta problemática, se suman las denuncias de pedidos de coima para permitir adelantamientos en las filas, incluso en la zona primaria, donde rige la jurisdicción del Área Naval de la Armada, encargados de coordinar la apertura del puente cuando sea solicitado por la Gendarmería Argentina.
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Varias instituciones son responsables del ordenamiento de la zona afectada, pero no hay un trabajo coordinado que permita que se agilice el tráfico fronterizo.
Desmienten pedido de coimas en zona primaria
El comandante del Área Naval en Itapúa, Jorge Maldonado, manifestó que no existen denuncias formales de algún pedido de coimas que debiera ser investigado.
Además, aseguró que el área tiene cámaras cuyas grabaciones se pueden verificar para constatar que no incurren en pedido de dinero para dejar pasar vehículos.
No obstante, afirmó que no son responsables de cómo se organizan las filas, que dependen de otras instituciones, entre ellas la Policía Caminera, la Policía Municipal de Tránsito y la Policía Nacional.
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Sostuvo que cualquier ciudadano que tenga conocimiento de un hecho punible, tiene la obligación de realizar una denuncia formal ante la policía o la fiscalía.
La fila sobre el puente está prohibida
El área de control integrado dispuso esta semana respetar la recomendación emitida por la 15° región de Vialidad Argentina, ente encargado de los mantenimientos del viaducto internacional.
Después de unos estudios de verificación, se determinó que lo mejor es evitar la carga estática sobre el puente. Esto significa que no se puede estacionar sobre el tramo de 2.5 kilómetros de la pasarela y el tránsito sobre ella debe ser fluido.
Esta medida implica un trabajo coordinado entre ambos países para notificar de un lado la cantidad de vehículos que pueden pasar en determinado tiempo, mientras se vacía la zona primaria de control del lado argentino.
Anteriormente, se permitía hacer fila sobre el puente hasta unos 500 metros, pero en la semana ante los cierres constantes realizados como medidas de protesta de los paseros y automovilistas, tomaron la decisión de prohibir estacionar los vehículos encima del viaducto.
A raíz de la medida, se extendieron las filas y la desorganización en varios puntos de la zona comercial de Encarnación y, como consecuencia, cada día se vive un caldeado ambiente entre riñas y peleas por adelantamientos indebidos.
Las instituciones se ven sobrepasadas
El crecimiento del tránsito vecinal fronterizo entre Encarnación y Posadas se acrecentó de sobremanera, sobrepasando la capacidad de control de los entes encargados.
Aproximadamente 3000 vehículos pasan por día entre las ciudades, y los controles demoran por lo menos entre 3 y 5 minutos. Además, la infraestructura del Área de Control Integrado cuenta con 9 casillas, de las que regularmente atienden 7. Durante la noche y madrugada el promedio desciende a entre dos y cuatro.
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Las ventajas en precios y el creciente microtráfico de mercaderías y en especial de combustible, también contribuyen a que aumente de manera exponencial el tráfico fronterizo.