Cargando...
Una larga fila de estudiantes del colegio nacional San José de Limpio esperaba pasar por el detector de metales instalado en la institución. El equipo entró en funcionamiento “por iniciativa de los propios padres y se bajó de la comisión de la ACE (Asociación Cooperadora Escolar)”, afirmó la directora Vicenta Aveiro.
El uso de un detector de metales en una institución pública del departamento Central, se da pocos días después de que una directora fuera apuñalada por un estudiante de 16 años en un colegio del distrito de Independencia en Guairá.
Lea más: Cristo Rey vuelve a la presencialidad pero con fuerte sistema de seguridad
Aveiro refirió que el objetivo es dar mayor seguridad a la comunidad educativa y “tratar de prever situaciones que puedan acontecer en la institución”. Confirmó que la puesta en marcha del artefacto electrónico es experimental y que, en su primera jornada, permitió identificar la presencia de cortaplumas, cuchillos tenedores, cutter y otros objetos que puede ser considerados peligrosos.
La directora afirmó que dichos elementos quedaron en la portería para que sean retirados por los padres de los alumnos que los portaban, posterior a una reunión con los mismos.
Analizan la permanencia del detector de metales en la institución
“Estamos analizando con el comité de riesgo de la institución y la comisión de padres las medidas más efectivas para poder subsanar algunos aspectos negativos que está trayendo consigo también este detector de metales. Todo esto estaba planificado hace poco más de un mes y los padres estaban en conocimiento, dieron su apoyo. También a los chicos se les informó”, finalizó Aveiro.
La presidenta de la ACE, Mabel Noguera, confirmó que los padres estuvieron de acuerdo con la implementación del equipo. Descartó que la idea de instalar el detector sea a consecuencia de hechos de violencia entre estudiantes de la institución. “Por precaución nada más estamos implementando”, añadió Noguera.
Lea más: Educación: suman 17 las amenazas a escuelas y colegios en 2023
La directora de Protección de los Derechos de la Niñez y Adolescencia del Ministerio de Educación y Ciencias (MEC), Sonia Escauriza, indicó que en su momento el colegio privado Cristo Rey había solicitado al juzgado la instalación de un sistema de detección de metales, tras una amenaza de tiroteo en la institución.
En este sentido, no existe registro en la cartera de gobierno de cuántos establecimientos escolares tienen el artefacto como medida de precaución. Escauriza comentó que otro dispositivo instalado en las escuelas son las cámaras de circuito cerrado, también por iniciativa de los padres.
La AIEPP descarta que un detector de metales sea la solución
El representante de la Asociación de Instituciones Educativas Privadas del Paraguay (AIEPP), Luis Ramírez, también descartó que cuenten con registros del uso de detectores de metales a nivel país. Remarcó que la aplicación de dicha tecnología no solucionará los problemas de violencia en las escuelas y colegios del país.
“Nosotros creemos que no se puede resolver el problema tratando de poner elementos para mejorar el fruto y no mejorar la semilla. Hay que ir a la raíz. Hay que entender qué está pasando en primer lugar para buscar la solución. Hoy se buscan soluciones muy simplistas. La creencia de que teniendo una mochila transparente o un detector de metales se soluciona el problema de la violencia, yo creo que no”, enfatizó.
Desde la AIEPP apoyan la solicitud de aumentar la cantidad de especialistas que atiendan a la salud mental en Paraguay. Ramírez manifestó que preocupa los índices de violación de menores, de suicidios y feminicidios, por lo que el problema, no solo está en las instituciones educativas.
Feipar es otra organización que tampoco apoya el uso de detectores de metales en establecimientos escolares.