Ángela Hermosilla, comerciante del barrio Yvoty, manifestó que en su comunidad viven en constante zozobra a causa de los ladrones que irrumpen en las casas y se llevan todo lo que encuentran a su paso.

Relató que hace unos días ingresaron de madrugada a su domicilio y se llevaron micrófonos, parlantes y focos. Muchas veces ni siquiera se llevan elementos de valor, pero el hecho de entrar a la propiedad ajena ya genera una preocupación y todos los días tenemos que estar en alerta, expresó la pobladora.

Asimismo, mencionó que en varias ocasiones ya escucharon movimiento de personas que ingresan a las casas en horas de la madrugada, se llama a la policía, pero los mismos no acuden con rapidez al lugar.

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Hermosilla lamentó que la gente ya no pueda estar tranquila ni en su propia casa y dijo que la forma en la que operan estos delincuentes es simulando que venden algo para acercarse a las casas, entrando a las viviendas para robar posterior a esto.

“Hay jóvenes que ofrecen frutas y otros que venden cosas que incluso fueron robados de la misma comunidad, hasta ese punto llegamos”, expresó.

La denunciante resaltó además que todos se conocen, se sabe que los jóvenes adictos provienen del barrio Santa María, que es una de las zonas más carenciadas de la ciudad.

“Al final, uno siente lástima por ver a la juventud perdida en las drogas. Las autoridades deberían fomentar actividades que puedan ayudar a los jóvenes a ocupar su tiempo, ya sea en estudios o en deportes”, dijo la denunciante y pidió más apoyo a las los agentes policiales.

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Otra de las trabajadoras que sufrió un gran susto por causa de los delincuentes es Noelia Amarilla. La comerciante mencionó que hace 15 días fue víctima de un intento de robo en su local que está ubicado en el barrio Yvoty, pero afortunadamente los malvivientes no pudieron ingresar porque no lograron abrir la puerta frontal y trasera de su negocio. Las imágenes fueron captadas por las cámaras de circuito cerrado y se pudo corroborar que los ladrones son las mismas personas de siempre.

Amarilla señaló que no es la primera vez que tratan de ingresar a su local y cuestionó la inoperancia de las autoridades policiales, que no acuden a tiempo cuando se los llama.

Vecinos buscan solución

Amarilla resaltó que los vecinos buscan una solución y, ante esta situación, remitieron una nota a la Comisaria local, solicitando intensificar los recorridos policiales. Sin embargo, los policías comunicaron que no pueden hacer una cobertura diaria en el sitio porque no cuentan con dinero para costear el combustible.

“Para ayudarnos entre los vecinos, pagamos el servicio de alarma y ahora estamos viendo la manera de juntar dinero para el combustible de los policías y reforzar la seguridad. Es una pena estar en estar circunstancias”, expresó la comerciante.

Por su parte, el Sub Jefe de la Comisaria de Caacupé, Luis Núñez, manifestó que realizan las coberturas de forma continua para brindar seguridad a la ciudadanía y reconoció que hay un importante aumento de jóvenes que se dedican a la delincuencia.

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Aclaró que el equipo de policiales si cuenta con lo necesario para costear el combustible de las patrulleras y aseguró que si es que tardan en llegar en donde los llaman es porque Caacupé es muy grande y ellos cubren todas las comunidades.

Indicó que solo en el mes de mayo han realizado 30 detenciones, de las cuales 20 han pasado a penitenciarias. Las zonas más comprometidas son los barrios San Francisco, Buena Vista y Santa María.

“El 90% de los hechos punibles son cometidos por personas de la ciudad, que en su mayoría son jóvenes adictos, estamos en una lucha constante y trabajamos para solucionarlo”, enfatizó el subjefe de la Comisaria de Caacupé.