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Desde hace más de cinco años la Escuela Básica N°4.095 Curuzú Francisco de Villarrica cuenta con un pabellón entero con cinco aulas en deplorables condiciones edilicias y desde 2020 se encuentran clausuradas por peligro de derrumbe.
Desde entonces los alumnos del séptimo, octavo y noveno grados utilizaban precarias carpas proveídas por el Ministerio de Educación y Ciencias (MEC). Este año se negaron a volver a utilizarlas por decenas de incomodidades; el intenso calor, falta de ventilación y de iluminación que dificultan el desarrollo de las clases.
Los alumnos del 7°, 8° y 9° utilizan la cocina - comedor como aula. El comedor fue readecuado con improvisadas mamparas divisorias, mientras que otro grupo está en lo que era cocina, es decir, tres grados funcionan como una especie de “plurigrado” dentro de un solo salón el cual dificulta el aprendizaje de los niños.
El año pasado, el MEC refaccionó cuatro aulas que corresponden a otro pabellón, pero aún faltan otros cinco salones que la Municipalidad de Villarrica se había comprometido a refaccionar.
Protesta y anulación de proceso
En agosto del año pasado la comuna hizo un llamado a licitación pública para la refacción del pabellón por más de G. 250 millones, quedó parado luego de que una de la presentación de protesta por una de las empresas oferentes, que aún no resolvió en la Dirección Nacional de Contrataciones Públicas (DNCP).
Ante esa situación la administración del intendente Magín Benítez (PLRA) decidió la anulación o cancelación de dicho llamado para gestionar otra convocatoria de oferentes.
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Nuevo llamado tardaría tres meses
El intendente de Villarrica, Magín Benítez (PLRA), explicó que su administración tiene la predisposición y los recursos necesarios para llevar adelante la refacción del pabellón completo con cinco salones, pero que el problema radica en la burocracia que conlleva hacer un llamado a licitación pública.
“Estamos conscientes de que los niños necesitan dar clases como corresponde, tenemos toda la voluntad posible, pero sin una autorización de Contrataciones Públicas o el MEC no puedo iniciar ninguna refacción. Estamos analizando si podemos proceder por la vía de la excepción o, si no, lleva de vuelta el mismo proceso a través de Contrataciones Públicas; estaríamos hablando de iniciar las obras en tres meses aproximadamente”, dijo el jefe comunal.
Otras necesidades de la institución
La Escuela Curuzú Francisco cuenta con cerca de 300 alumnos matriculados en los turnos mañana y tarde desde el nivel inicial hasta el noveno grado. Además de la infraestructura, la institución también urge la provisión de mobiliario nuevo, como mesas, sillas con pupitres, escritorios, entre otros. También de un área de esparcimiento adecuado para los niños.
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