Cargando...
Dos salones de clases de la Escuela Básica Nº 5.583 Puerta del Sol del barrio Cándida Achucarro de la ciudad de San Antonio se encuentran clausuradas desde el 2021 por el Ministerio de Educación y Ciencias (MEC), y los padres exigen la reparación.
Según la denuncia de los padres de la institución, el bloque corre serios riesgos de desplomarse, debido a que las maderas se están desplazando y en algunos sectores ya se está desprendiendo de las paredes.
Además, en varios otros sectores se notan enormes grietas en las paredes y en los pilares, y exigen una verificación de parte de las autoridades y así evitar que ocurra alguna tragedia en la institución, a la que acuden cientos de niños.
Lea más: Se desploma por completo el techo de un aula y la galería de una escuela
Consultado el intendente municipal, Santiago Aguilera, liberal, sobre la reparación, e indicó que cuentan con el proyecto y el dinero para la reparación total del techo, y que solo aguardan la autorización del MEC.
“Estas aulas se clausuraron antes de que asumiéramos, y el año pasado ya hicimos figurar en la micrcoplanificación como prioridad, ya tenemos el dinero y el proyecto para la reparación, y solo esperamos la autorización del Ministerio de Educación para poder iniciar los trabajos”, expresó Aguilera.
Comentó que arquitectos del MEC ya verificaron las aulas y en los próximos días estarían autorizando el inicio de los trabajos en la mencionada casa de estudios. El techo tiene goteras, según indicaron los padres.
Lea más: Escuela de San Antonio se queda sin agua por falta de pago a junta de saneamiento
Delincuentes acechan a la institución
La inseguridad reinante en la ciudad hace que hasta las instituciones educativas sean blanco seguro de los delincuentes, que se llevan hasta los pinceles de los niños. Esta institución ya fue objeto de varios robos.
Lea más: San Antonio: delincuentes ingresaron por segunda vez a robar en un escuela
El pasado 1 de marzo los malvivientes ingresaron a la sala del preescolar y se llevaron una computadora portátil, un bebedero eléctrico, pinceles y pinturas de los chicos, además se alzaron con algunos medicamentos del pequeño botiquín.
La policía sospecha de exalumnos de la casa de estudios, que aprovechan la oscuridad de la noche para ingresar y robar los pocos objetos de valor. Los vecinos alegan que en el barrio pululan los adictos a las drogas.