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En el evento de recepción realizado este lunes en la zona donde se lleva adelante la construcción de la Central del Brazo Aña Cua, estuvieron presentes Nicanor Duarte Frutos; la consejera de la argentina de la Entidad Binacional Yacyretá (EBY), Ana Almirón; y el ingeniero Carlos Yorg, gerente de la Margen Derecha del Proyecto del brazo Aña Cua.
Durante el acto Duarte Frutos manifestó que el paso dado hoy con la llegada de los trasformadores de potencia, es la consecuencia de una planificación adecuada que se vino impulsando y es el producto del trabajo de los compañeros y compañeras de las diferentes empresas que están trabajando acá, para terminar esta obra a plazo. Así como están los procesos, Aña Cua estaría terminando en el año 2025.
“Este es un proceso que se hizo con mucha transparencia. Es una licitación que se llevó a cabo para dotar de los transformadores a Aña Cua, que se fabricaron en Croacia, con una tecnología de punta para garantizar la eficacia de la transmisión de la energía de Aña Cua hasta Yacyretá”, expresó.
También resaltó que la licitación pública internacional de provisión de transformadores y estación blindada tenía un precio referencial de US$ 36 millones, sin embargo, tras un proceso transparente y competitivo, se logró adjudicarla en US$ 17 millones.
Durante el uso de palabras, Carlos Yorg manifestó que los transformadores de potencia fueron fabricados en Croacia, y que forman parte de la provisión electromecánica a cargo del Consorcio Siemens-Rieder Aña Cua ATE. Además, incluye la Estación GIS (SF6) de 500 kV.
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“Cada uno de los equipos tiene una capacidad nominal de 105 MVA y una masa total de 131 toneladas, aproximadamente. El costo de cada transformador es de unos US$ 1.200.000. Los transformadores tuvieron un plazo de transformación de 12 meses y que salieron de puerto hace cuatro, llegando por vía marítima hasta Buenos Aires (Argentina) y luego por tierra hasta la represa Yacyretá”, explicó.
La función de cada transformador es elevar la tensión de 13,2 kV generada por las Unidades de la futura Central Aña Cua a 500 kV, a fin de que la energía producida ingrese al sistema de barras de 500 kV de Yacyretá, permitiendo la interconexión eléctrica entre ambas centrales.
Tres de ellos serán energizados y puestos en servicio, mientras que el cuarto transformador servirá de reserva para dar una respuesta rápida si alguno de los transformadores tuviese inconveniente.
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