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La cancelación de la deuda de Itaipú es un hito dentro de la historia del sistema energético paraguayo, es una meta alcanzada por la entidad binacional, manifestó el titular de la Federación de la Producción, la Industria y Comercio (Feprinco), Ing. Enrique Duarte.
“Esperamos que la cancelación de la deuda de Itaipú pueda convertirse en un elemento acelerador para el logro de las metas de actualización de la infraestructura energética nacional, pues los requerimientos, debido al constante avance de los procesos tecnológicos, demandan no solo energía, sino que la den en condiciones de calidad y previsibilidad. Para eso, la inversión es sumamente necesaria”, agregó Duarte. Enfatizó que el aumento de la producción industrial del Paraguay demandará un mayor consumo de energía eléctrica.
Sobre los desafíos que se tienen ahora con Itaipú, enfatizó que el principal consiste en lograr la revisión del Anexo C. “El Paraguay debe reivindicar el principio del justo precio, consignado en el acta de Foz de Yguazú del 22 de junio de 1966. Las nuevas circunstancias aconsejan una renegociación del tratado, que garantice otros 50 años de producción e integración energética entre el Paraguay y el Brasil”, dijo.
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Por otra parte, el presidente de la Unión de Gremios de la Producción (UGP), Ing. Héctor Cristaldo, destacó que la cancelación de la deuda de Itaipú es la culminación de un proceso de 50 años, luego del cual este activo esta libre de cargas financieras.
“Este logro nos lleva a repensar qué es lo que queremos hacer con la energía paraguaya y nos posiciona como país con fuente de energía renovable, como base para nuestro desarrollo sostenible. Es momento de usar toda esa energía para consolidar nuestro proceso de desarrollo”, manifestó.