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En comunicación con ABC Cardinal este jueves, el doctor Vicente Acuña, director del Hospital Materno Infantil San Pablo, reflexionó sobre los déficits de seguridad en el centro asistencial que dirige, luego de que el pasado viernes una mujer robara una bebé recién nacida de una sala de internación.
El pasado viernes, una mujer identificada como Myriam Fabiola Díaz sustrajo a una niña nacida el miércoles en el Hospital San Pablo, luego de haber estado acompañando a la madre de la menor. La mujer y su pareja fueron detenidas el pasado martes en Caacupé, cuando llevaron a la niña a un hospital por problemas de salud, y la bebé ya fue reunida con sus padres.
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Ante cuestionamientos por el hecho de que Díaz pudo entrar en la sala de internación del Hospital San Pablo donde estaban la niña y su madre María Ángela Zelaya, el doctor Acuña dijo que existen indicaciones para los pacientes del centro de salud y sus familiares, incluyendo el pedido de que solo una persona acompañe a la paciente, e indicó que existe un horario de visitas establecido.
Sin embargo, admitió que el hospital no tiene suficiente personal para controlar el cumplimiento de esas indicaciones y señaló que, en general, los hospitales en Paraguay carecen de personal de seguridad entrenado.
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“Es momento que se tome en serio esta cuestión y se dote a hospitales de personal de seguridad”, opinó el doctor Acuña.
Agregó que, en vista de lo ocurrido el pasado viernes, se tomó la decisión de colocar personal de otras áreas del hospital en los accesos al área de internación de mujeres parturientas, a fin de tener un control de las personas que entran y salen de la zona.
El doctor Acuña explicó que las salas de internación en el hospital albergan a cuatro pacientes con sus respectivos acompañantes, con un funcionario del hospital encargado de cada sala.
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Indicó que al hacer el control rutinario, la enfermera a cargo de la sala en que estaban María Ángela Zelaya y su hija recién nacida asumió que Díaz era familiar de Zelaya, por la forma en que conversaban.
“El déficit es que no había un control de quién llegaba al segundo piso”, insistió el médico.
En reacción a lo ocurrido en el Hospital San Pablo, el Ministerio de Salud Pública anunció ayer que está analizando la implementación de restricciones para el acceso a las salas de internación en áreas de maternidad.