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La Asociación de Productores Orgánicos (Apro) y el Centro de Estudios y Formación para el Desarrollo Alter Vida hicieron entrega de los certificados de sello orgánico a un total de 84 agricultores de Independencia, Félix Pérez Cardozo y Villarrica, Guairá, quienes se dedican al cultivo y cosecha de productos orgánicos sin la utilización de ningún tipo de plaguicidas, herbicidas u otros elementos químicos. Con dicho documento, los mismos están habilitados para distribuir sus productos en diferentes tiendas o supermercados e inclusive para la exportación.
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La señora Ilda Gómez, miembro de la asociación de mujeres productoras Virgen de Caacupé de Independencia, contó el orgullo y honor que sienten al recibir la certificación, tras dos años de arduo trabajo.
“La certificación nos sirve para que nuestra producción orgánica tenga garantías para la gente que nos compra. Recuerdo que antes todo era orgánico como cultivaban mis padres, después vino la tecnología y el avance y ahora se utilizan muchos insecticidas y fertilizantes químicos. Nosotros no utilizamos eso, es totalmente natural”, destacó la mujer.
El Servicio Nacional de Calidad y Sanidad Vegetal y de Semillas (Senave) fue el encargado de verificar las distintas fincas y los requisitos para la obtención del sello orgánico, los cuales son muy exigentes, con el acompañamiento de la asociación de productores orgánicos y el apoyo de las oficinas locales de la Dirección de Extensión Agraria (Deag).
“A partir de ahora, ellas ya van a venir a feriar con su sello orgánico nacional. Todo eso da al consumidor la garantía de que está comprando productos sanos, libres de venenos. Estamos también implementando una campaña de consumo ecológico para llegar a los consumidores y que conozcan los beneficios de estos”, explicó el coordinador de campo de Alter Vida, Ing. Mario Paredes.
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Productos libres de químicos
Los responsables indicaron que los productos orgánicos están libres de residuos tóxicos, los cuales al encontrarse en los productos pueden perjudicar la salud. Con el tiempo, estos residuos se acumulan en el organismo y generan enfermedades y problemas a largo plazo. A través de la certificación orgánica, existe la confianza de consumir estas hortalizas, frutas y otros derivados sin que la salud se vea perjudicada.
El Ing. Genaro Ferreira, coordinador de Apro, sostuvo que en Paraguay existen dos tipos de certificación: por Ley del Sistema Participativo de Garantías, para el mercado local -la que se entregó recientemente-, y la otra es tercera parte, una certificación para exportación. Según la Ley 2.481/08, con esta certificación los productores pueden entrar a un mercado formal, como pueden ser supermercados y tiendas.
“Mucha gente ha optado por este tipo de alimentos. Tenemos varios doctores que recomiendan a sus pacientes el consumo de productos orgánicos y gracias a ellos se difundió el valor de estos productos; ya hay nutricionistas, deportistas, modelos, celebridades incluso que nos ayudan con este objetivo. Cada vez aumenta la demanda, además de que gran parte de los extranjeros que llegan preguntan de dónde pueden adquirir productos orgánicos,” destacó Ferreira.
Las acciones de la certificación orgánica se realizaron en el marco del proeyecto “Desarrollo de la agricultura orgánica campesina para la recuperación econímica y reactivación productiva” implementado por Alter Vida y la Fundación ETEA, financiada por la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), que también llevan adelante una campaña de consumo ecológico con el eslogan: “Comiendo sano cuidás tu salud y al planeta”, con el fin de concienciar a la población sobre el consumo de alimentos sanos y ayudar a los agricultores a ubicar sus productos.