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Alrededor de mil personas, representantes de distintas organizaciones sociales provenientes de comunidades del Chaco, de Asunción, Central y otros puntos del interior del país, se congregaron esta mañana en la Plaza Italia, donde iniciaron su marcha por el respeto de los Derechos Humanos colectivos e individuales en nuestro país.
“Lastimosamente en nuestro país, los derechos humanos colectivos e individuales están quebrantados, atropellados por el propio Estado, que debería ser garante de los derechos humanos”, lamentó Marcial Gómez, secretario general adjunto de la Federación Nacional Campesina (FNC), una de las organizadoras de la actividad.
“Uno de los temas principales es el problema de la tierra. Desde el Estado, cada vez más se criminaliza la lucha por la tierra, hay persecución, hay desalojo, hay atropello a comunidades campesinas e indígenas, en vez de garantizar el acceso a la tierra, el acceso a la producción, a la vivienda, al bienestar, a la alimentación, a la salud, al agua”, añadió el dirigente campesino.
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Gómez detalló que por ello, uno de los objetivos de la marcha es ”repudiar la falta de una política de Estado que garantice el acceso a los bienes sociales que hay en el país, que son los derechos fundamentales consagrados por la Constitución Nacional y tratados internacionales, pero que acá no se cumplen”.
El propio Estado violenta los Derechos Humanos, afirman
“Por otro lado, exigir el respeto a los luchadores sociales, a los defensores y defensoras de derechos humanos, que cada vez más están criminalizados, perseguidos, algunos luchadores sociales en la cárcel. Muchos compañeros, compañeras campesinos, indígenas, de los sectores populares, dirigentes de los organismos de Derechos Humanos están imputados, perseguidos”, detalló el líder de la FNC.
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Para el dirigente Marcial Gómez, “hay una política intencional del propio Estado, que violenta los derechos de la gente, del campesinado, de los pueblos indígenas, para garantizar un modelo económico hegemónico basado en el latifundio, basado en el modelo de producción agroexportador, la ganadería a gran escala para la exportación de materia prima, no para dar salida a los problemas sociales y económicos de nuestro país”.
En ese contexto, lamentó que el Instituto Nacional de Desarrollo Rural y de la Tierra (Indert) “prácticamente está sin presupuesto para compra de tierra”, mientras el Instituto Paraguayo del Indígena (Indi) tampoco tiene fondos para atender las necesidades de los pueblos indígenas. “En las mismas condiciones, el Ministerio de Agricultura está cada vez con menos recursos”.
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Sin embargo, aseveró Gómez, “sí hay recursos para las fuerzas represivas, para que se proteja el modelo económico actual”.
Reclamos a la Fiscalía y al Ministerio del Interior
En cuanto al derecho a la educación y la salud, el líder campesino lamentó que los hospitales están sin medicamentos y las escuelas, “totalmente abandonadas”.
Las organizaciones sociales marcharon primero hasta la sede del Ministerio Público, que, aseveraron, se convirtió “en un instrumento de persecución a nuestro pueblo, a luchadores sociales”. Posteriormente se dirigieron al Ministerio del Interior, para protestar contra “la política represiva que hay en nuestro país”.
En el la Plaza de la Democracia se realiza un acto central, con Mario Rivarola, representante indígena, Teodilona Villalba, de la FNC, y Dante Leguizamón, representante de Codehupy (Coordinadora de Derechos Humanos del Paraguay).
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Así también, en la Plaza de la Democracia, la Asociación Unidas en la Esperanza (Unes) presenta el informe “Violencia hacia las mujeres trabajadores sexuales en Latinoamérica y el Caribe 2021. Capítulo Paraguay”.