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La producción de algodón está renaciendo en el país gracias a su cultivo mediante la alta tecnología y maquinarias, en el Chaco, por iniciativa de emprendedores. Eso también motiva otras inversiones, pues ya hay cuatro desmotadoras instaladas. Los agricultores de la región Occidental están impulsando el “milagro” de la recuperación de aquella planta tras su decadencia y casi extinción. Lo hacen con miras a cubrir el mercado interno de la materia prima, la cual se venía importando de lejanos mercados e incluso para volver a exportar.
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Durante la década de 1990 la siembra del algodón tuvo su mayo dinamismo y era por entonces uno de los principales rubros de la economía rural de nuestro país, porque llegó a cubrir en todo el territorio unas 560.000 hectáreas, lográndose con ello alrededor de 753.000 toneladas de cosecha, que movían una cadena industrial con 47 plantas desmotadoras. Hasta hace pocos años, específicamente hacia el 2017, el área de cultivo había caído a cerca de solo 6.000 hectáreas.
El cultivo del textil en el Chaco con uso de tecnología se inició tras la liberación de la semilla transgénica por parte del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), a partir del 2011, por parte del Ing. Agr. Carlos Passerieu, en la estancia del Grupo Cresca, en el departamento de Boquerón, a unos 30 km de Mariscal Estigarribia.
Luego las cooperativas menonitas también empezaron a trabajar con el algodón mecanizado, aprovechando la autorización comercial para las semillas tecnificadas, con un modelo productivo que requiere fuerte inversión, para la siembra, la cosecha y el desmote, cerrando el ciclo.
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Los otros rubros agrícolas
En todo el Chaco se prevé la siembra de 10 rubros agrícolas y según el plan de la campaña 2022/ 2023, de la Asociación de Productores Agropecuarios para un Chaco Sustentable (APACS), en la presente campaña se proyecta sembrar unas 70.000 hectáreas de soja, 64.270 hectáreas de maíz, 17.160 hectáreas de sorgo, 49.350 hectáreas de algodón, 3.930 hectáreas de maní, 360 hectáreas de chía, 26.900 hectáreas de sésamo, 4.300 hectáreas de cártamo y unas 10.000 hectáreas de arroz.
