Monseñor Benítez lamentó la violencia que sufren las mujeres y abogó por leyes que las protejan

Mons. Amancio Benítez, obispo de Benjamín Aceval, presidió la misa vespertina en el tercer día del novenario de la Virgen de Caacupé. El obispo realizó su homilía en el idioma guaraní. En su lectura, instó a las autoridades que atiendan y protejan a las mujeres que sufren de violencia.

Monseñor Benítez lamentó la violencia que sufren las mujeres y abogó por leyes que las protejan
Monseñor Benítez lamentó la violencia que sufren las mujeres y abogó por leyes que las protejan

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Mons. Amancio Benítez inició su homilía en el santuario de Caacupé en el guaraní y manifestó que debe haber más leyes que protejan a las mujeres, pidiendo así la Policía Nacional y el Poder Judicial que consideren y atiendan a las mujeres que denuncian hechos de violencia.

Así también refirió que los hombres deben arrepentirse y pedir perdón ante Dios y ante la Virgen por violentar a las mujeres y por asesinarlas. También señaló que los hombres “viven con odio” y por ello actúan de esa manera.

Asimismo, dijo que dentro de las familias hay madres, mujeres, hermanas e hijas que muchas veces quieren abandonar sus hogares porque son víctimas de violencia intrafamiliar.

El obispo pidió que existan leyes que protejan y garanticen la seguridad de las mujeres que son victimas de violencia.

“Es muy importante que se tenga en cuenta que muchas veces por la desatención y falta de gestión de las autoridades es que se presentan tantos hechos de violencia y por no dar la atención correspondiente en su debido momento, ocurren los feminicidios”, expresó.

“No esperen a que se lleguen a asesinatos o feminicidios”, sostuvo el obispo.

Así también resaltó la importancia de la mujer en la iglesia y exhortó a las familias a que enseñen el santo rosario a sus hijos y que no pierdan las costumbres.

“Upéicha tekotevẽ jajepy’amongetami avei mba’erépa ojejuka ha ojerereko asyete heta kuñanguérape ko ñane retãme. Ñande iglesia guive ñaipytyvõve va’erã opa hagua ko’ã mba’e vaiete oikóva. Aníkena jajahéi Kuñanguérape rehe, ñañangareko avei hese kuéra ñane retã tuichakue javeve”, refirió durante su homilía.

“Tupãsy Ka’acupé tosambyhy Kuñanguérape; toñemomba’e mive hekove, ha tojehechakuaave hembiapo ha ikéra yvoty”.

El obispo Benítez manifestó que uno debe reflexionar seriamente en la iglesia y en las parroquias sobre el incremento de la violencia contra las mujeres y “todos juntos como cristianos” debemos hallar una vía de solución, de cómo parar esa violencia y que se respete la vida de la mujer.

Así también pidió que se inicie una campaña desde la iglesia para promover el respeto y la dignidad de las mujeres. “Que la Virgen de Caacupé proteja a todas las mujeres de todo maltrato y les bendiga hoy y siempre”, puntualizó el religioso.

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